Invierten 64 mdp en equipar a policías de BCS

Con una inversión total de 64 millones de pesos, este lunes se entregaron unidades y equipamiento a las diversas corporaciones policiacas de Baja California Sur. En cuanto a las unidades, se entregaron 75 vehículos, entre patrullas, ambulancias forenses, de vehículos para investigaciones, motocicletas y cuatrimotos. Estos están dirigidos al Sistema Penitenciario, a la Policía Estatal y a la Policía Municipal de Los Cabos, de Mulegé y de Loreto, de Comondú y de Mulegé. Respecto a los armamentos, se entregaron 24 fusiles de asalto calibre 5.56 x 44 milímetros semiautomáticos, 9 rifles semiautomáticos calibre 5.56 x 45 milímetros, 11 pistolas semiautomáticas calibre 9×19 milímetros. Así también 14 cargadores para fusil de asalto, 200 cargadores para pistola 9 milímetros, 425 cargadores para pistola calibre 9 milímetros, 8 cargadores para pistola calibre 0.40 y 10 cargadores para pistola calibre 9 × 9 milímetros. Fueron 64 mil 750 cartuchos calibre .223, 68 mil cartuchos calibre 9 milímetros, 190 mil cartuchos calibre 9 milímetros y 176 mil cartuchos calibre 5.56 milímetros, que serán usados por las corporaciones de la Policía Estatal, la de Loreto, Comondú y Mulegé. También recibieron diversos equipos tácticos, como chalecos balísticos, esposas, cascos y herramientas de rapel y rescate. Entregaron equipo informático y de comunicaciones, consistente en computadoras, equipo de impresión, diversos componentes, radios y baterías para terminal. Y, 2 perros pastores belgas especializados en detención de 5 narcóticos, marihuana, cocaína, heroína, metanfetaminas y éxtasis, así como armas. El mandatario estatal, Carlos Mendoza Davis, afirmó que, sin duda alguna, “el tema de seguridad ha sido el más sensible y el más complejo de resolver” en los cuatro años que lleva al frente de la administración del Gobierno Estado. Comentó que recibieron un estado que tenía acciones de violencia importantes, había homicidios y ejecuciones frecuentes, enfrentamientos entre grupos criminales que no eran distintos a lo que sucedía en otros estados del país. “Por supuesto que el reto fue monumental, tuvimos que echar mano de todo lo que teníamos a disposición, pero, sobre todo, de la herramienta más importante y poderosa que es el trabajo conjunto, que es la coordinación y la confianza entre instituciones”. En ese tenor, dijo que recibió el apoyo formal, puntual y profesional de las fuerzas armadas, de la Secretaría de Marina, de la Secretaría de la defensa nacional; así también, contó con la suma de voluntades de los gobiernos municipales en la primera parte de su administración y los que hoy actualmente están. Después de un par de años aproximadamente, en conjunto todas las autoridades y niveles de gobierno, se logró pasar de ser el estado más violento del país, en términos relativos comparándolo con el número de ciudadanos, al segundo con menos homicidios violentos dolosos y el único de los que han vivido el fenómeno de la violencia que “ha logrado contenerlo de manera razonable”.