El turista ya no sólo busca sol y playa, hay que darle experiencias: Investigador

- Ricardo Peralta Antiga, director del Centro Interdisciplinar para la Investigación del Ocio en Oaxaca señaló que los destinos deben ser inclusivos con las personas con discapacidad, no solamente desde una perspectiva humanista, si no como una oportunidad de incrementar la rentabilidad del negocio, ya que está comprobado que un turista con discapacidad derrama en promedio 30% más que una persona sin limitaciones físicas.
Lizbeth Jaimes Galindo
Cabo San Lucas.- Ricardo Peralta Antiga, director del Centro Interdisciplinar para la Investigación del Ocio en Oaxaca, señaló que han detectado en sus estudios, que el turista ya no sólo busca el sol y la playa, sino experiencias con la misma naturaleza, pero además, los destinos deben ser inclusivos con las personas con discapacidad.
El investigador participó en el segundo día de actividades del Congreso de Turismo y Desarrollo Sustentable del ITES Los Cabos.
Previo a su conferencia, concedió entrevista para este medio de comunicación donde explicó el fenómeno del ocio, como uso del tiempo libre, prácticas recreativas asociadas a descubrir cómo la cultura nos ha venido formando en algunas actividades, dentro de ellas está el turismo como una de las posibles manifestaciones del ocio. “Como sociedad, nos alejamos de esta visión del ocio como pérdida de tiempo y nos acercamos mucho más a la perspectiva del ocio como desarrollo humano”.
Y en relación a ello, hay tendencias de cómo se ha venido manifestando un cambio en las acciones de niños y jóvenes a través del acceso a la información y las tecnologías, y al mismo tiempo cómo se conservan patrones, en el caso de Oaxaca, patrones prehispánicos ligados a los pueblos originales.
En la actualidad, dijo, convivimos con muchas manifestaciones distintas de ocio que tratan de dar cuenta para que los jóvenes observen un panorama sobre lo que pueden desarrollar profesionalmente.
Y especificó que una de las tendencias importantes en el tema es la actividad, es decir, la gente cada vez se centra más en una economía de experiencias, que en una economía de descanso. Esta idea del sol y playa con todas las comodidades posibles, cada vez es menor, más bien, busca que le incluyan experiencias en entornos culturales, naturales, que diversifiquen su estancia en un lugar. Otra de las tendencias es ser inclusivos, principalmente con personas con discapacidad y adultos mayores, en donde pasemos de darles caridad a entenderlos como un mercado. “La capacidad económica de la persona con discapacidad es más amplia y la posibilidad de acceder a ciertos lugares, es mayor”.
En términos generales, es un 30% más de derrama que deja una persona con discapacidad, que una sin discapacidad. Por eso la tendencia es que la industria turística observe esto como un fenómeno de rentabilidad y no de ‘ayuda’ a la otra persona.
Qué tan posible es que esto se aplique en Baja California Sur?
Señala el experto que ya se están haciendo algunos ejercicios en la entidad, pues hay una empresa que ya está empezando a operar servicios de buceo para personas con discapacidad, y en Los Cabos están haciendo un estudio de accesibilidad para evaluar cómo está la industria hotelera en términos de infraestructura. Sí es factible y hay que romper ciertas tendencias de lo que se viene trabajando en otros lugares, pero buscarían una distribución más equitativa de los beneficios económicos que genera el turismo, porque de alguna manera en espacios como Cabo San Lucas y San José del Cabo. Por eso, se buscaría la forma de cómo distribuir de mejor manera procesos económicos a través de prácticas de turismo ocio-recreación.