Reduce enmallamiento de lobos marinos en La Paz

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Lobo marino enmallado en Isla Espíritu Santo.

En las últimas dos décadas se ha logrado reducir el porcentaje de lobos marinos enmallados en el Parque Nacional Zona Marina del Archipiélago de Espíritu Santo. Así lo señaló el profesor Fernando Elorriaga Verplancken, investigador del Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas del Instituto Politécnico Nacional (CICIMAR-IPN), quien resaltó que esto se ha conseguido gracias al esfuerzo de académicos, autoridades y sociedad civil.

“Hace varios años, digamos que a principios de los 2000, podíamos encontrar hasta un 7% o un 8% de la colonia que tuviera alguna evidencia notable sobre estas redes en el cuerpo, 7-8% a principios de los 2000. Hoy en día estamos hablando de un 1%. Por abajo de 1%”, especificó.

La colonia de lobos marinos de california de Los Islotes, ubicada en Espíritu Santo, es una de las más sanas del Golfo de California, según refirió el académico. De acuerdo a las últimas cifras, se compone de entre 600 y 650 ejemplares.

Esa colonia es monitoreada por instituciones académicas, incluyendo al CICIMAR-IPN y a la Universidad Autónoma de Baja California Sur; autoridades, como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP); y organizaciones civiles. En coordinación, actúan en aquellos casos en los que se identifica a un lobo marino con una red de pesca.

Respecto a cómo llegan los lobos a enredarse en las redes, el doctor explicó que esto se debe a que en las zonas donde ellos se alimentan se practica la pesca artesanal. Los lobos pueden quedar atrapados en ellas por la noche, al no percatarse de su presencia, o entrar a ellas para comer el producto pescado.

“Varios de ellos pueden morir en ese momento, ahogados, y lamentablemente pasan inadvertidos. No sabemos de ellos. Pero hay otros casos que puedan considerarse más afortunados, entre comillas, porque son capaces de romper la red, pero se llevan un fragmento con ellos; entonces estos lobos al salir a tierra, van a tener estos fragmentos. Los que son jovencitos, crías o juveniles, van a empezar a crecer y esto va a empezar a cortarles, y eventualmente puede llegar hasta asfixiarlos y acabar con su vida”, detalló.

El profesor enfatizó que para atender de manera inmediata estas situaciones también se requiere de la participación de la ciudadanía. En este sentido, pidió a la población que, si observan a un lobo marino enmallado, tomen fotografías o videos y den aviso al 911.

Andrea Villarreal
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