TECLA 7/6: OMISIÓN HISTÓRICA

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“Hoy que se lee en la prensa escrita lo del pronunciamiento contra cinco ex presidentes, la lista presidencial no incluyó los miles de muertos, desaparecidos, encarcelados, perseguidos. El derecho negado a consultar a un pueblo agraviado. Hoy, a 52 años del genocidio, la justicia sigue en la oscuridad. En la Presidencia de la República, en el Poder Legislativo y en la SCJN se ha hablado de cinco ex presidentes; el partido en el poder, Morena, lo ha secundado. Si se habla de justicia, por qué entonces, no Luis Echeverría”.

Hay días que se quedan con el dolor, que se quedan en la oscuridad.
   Rabia con un eco muy largo contra la impunidad.
    El genocidio del 2 de Octubre de 1968 y la masacre estudiantil del 10 de junio de 1971, en un día como hoy, que se da cuenta de la consulta presidencial  aprobada por seis magistrados contra cinco de la Suprema Corte de Justicia de la Nación—SCJN—para llevar a juicio a cinco ex presidentes de la República, con todo el horror de botas militares aplastando vidas y de jueces y ministerios púbicos encarcelando conciencias libres; toda esta tragedia no fue suficiente para que  la Presidencia, la Cámara de Senadores y Morena, incluyeran en su llamada democracia participativa –para exigir cuentas– a Luis Echeverría Álvarez.
    Este 2 de octubre en el que se difunde por los medios impresos del país el pronunciamiento constitucional de la SCJN sobre la consulta popular para llevar a la justicia a cinco ex presidentes, López Obrador no incluyó a Luis Echeverría.
    Este 2 de octubre se cimbra por  más rabia, más frustración.
   La propia SCJN, que ayer debatía sobre lo constitucional o no de la consulta popular obradorista, ignoró debate alguno y exigencia nacional de justicia para el 2 de Octubre. Justicia para México. Justicia para los miles de estudiantes asesinados, desaparecidos, encarcelados, perseguidos, por un sistema asesino y represor, a cuyo Poder Ejecutivo en aquel 1968, los Poderes Legislativo y Judicial se postraron ante la gran hiena de Gustavo Díaz Ordaz y de Luis Echeverría, entonces secretario de Gobernación. 
     Hoy era un día para hablar de justicia.
    El presidente ministro Arturo Zaldívar en respaldo a la propuesta presidencial por la consulta popular, acuñó la expresión de “política criminal”, que fue precisamente, lo que pasó con el ’68, el ’71 y tantos otros episodios lamentables más. Pero, la “política criminal” que fue respaldada por otros ministros para dar como constitucional la consulta contra cinco ex presidentes, no alcanzó para quitar la oscuridad que pesa sobre las represiones estudiantiles. Y dar justicia. Ni siquiera llevar a consulta este gran pedazo de historia manchado con sangre. Impunidad vigente.
   La SCJN –se dijo en el debate de ministros—tenía la facultad de reformular la pregunta enviada por López Obrador. Pero, la oscuridad siguió. Nada del ’68. Nada de esos hogares que lloraron a sus muertos cercados y desaparecidos por ejercicios tácticos militares y vueltos a asesinar en vida por conductas aberrantes  ministeriales y judiciales para privarlos de su libertad.
   Hoy que se lee en la prensa escrita lo del pronunciamiento en contra cinco ex presidentes, la lista presidencial no incluyó los miles de muertos, desaparecidos encarcelados, perseguidos. El derecho negado a consultar a un pueblo agraviado. Hoy, a 52 años del genocidio, la justicia sigue en la oscuridad. En la Presidencia de la República, en el Poder Legislativo y en la SCJN se ha hablado de cinco ex presidentes; el partido en el poder, Morena, lo ha secundado. Si se habla de justicia, por qué entonces, no Luis Echeverría. Es un grito que debe de retumbar la Plaza de Tlatelolco, que cruza desde Chihuahua a Chiapas, va de Sonora a Campeche, se extiende desde la Península de California a la de Yucatán, va de Guerrero a Tamaulipas, surca en nuestros mares.
    Si bien en 1910 se nos legó el Voto Efectivo No Reelección, las masacres estudiantiles sacudieron el totalitarismo de una presidencia secuestrada y contribuyeron al México democrático de hoy.
    No basta un discurso si no hay justicia por el genocidio perpetrado contra estudiantes.      
    Es tan doloroso el 2 de Octubre que no se va, que se mantiene el puño en alto con el Ni Perdón ni Olvido.
   Esos jóvenes fueron masacrados por no ser silencio. Ganaron las calles con sus cantos. Por su vida tenemos la vida que hoy vemos en las urnas y las minorías alcanzaron espacios de representación popular. Pero, qué terrible oscuridad de 52 años en los que se niega la luz de la justicia.
    Hoy, en el 2 de octubre, leemos en la prensa escrita de la consulta presidencial, enviada por el Senado y su discusión en el Poder Judicial. Nada, sin embargo de las masacres estudiantiles. Pero hablaron de “política criminal”. Vaya omisión histórica. 

   GRILLAS Y GRILLOS
–Genaro Ruiz fue ayer fue tema en Baja California Sur, renunció al gabinete estatal. Se integrará al PAN. A todos les dejó la duda y especulaciones sobre su futuro político. Por lo pronto al ex secretario estatal de Turismo y ex secretario estatal de Planeación Urbana, se le verá por Los Cabos en donde tiene su residencia.
–De los votos en contra de la desaparición de 109 fideicomisos y fondos que se dieron ayer en la Cámara de Diputados, del aliado morenista, el PT, se sumaron en contra 27 del PT; entre éstos el de Alfredo Porras. Por igual se dieron los votos en contra de las bancadas opositoras del PAN, PRI, PRD y MC. También, estuvo en contra el del panista Rigoberto Mares. Entre los fondos a desaparecer está el Fonden, el que se activa en lugares como Los Cabos cuando hay desastres naturales a causa de los ciclones.

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