BCS se adhiere a la Ley de Grasas Trans para cuidar la salud del corazón

La segunda semana de septiembre entrará en vigor en México la Ley de Grasas Trans, que prohíbe exceder el 2 por ciento de su contenido total en productos comestibles
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Centro de Salud de San José del Cabo.

Debido a una reforma a la Ley General de Salud, a partir de la segunda semana de septiembre entrará en vigor en México la “Ley de Grasas Trans”. Estas grasas están relacionadas con problemas cardíacos, lo que ha llevado a tomar esta medida.

La reforma fue aprobada el 9 de febrero por la Cámara de Diputados con 742 votos a favor, ninguno en contra y cero abstenciones. El Artículo 216 bis de la Ley General de Salud establece:

“Los aceites y grasas comestibles, así como los alimentos y bebidas no alcohólicas, no podrán contener en su presentación para venta al público aceites parcialmente hidrogenados, conocidos como grasas trans, que hayan sido añadidos durante su proceso de elaboración. Asimismo, los alimentos, bebidas no alcohólicas, aceites y grasas no podrán exceder dos partes de ácidos grasos trans de producción industrial por cada cien partes del total de ácidos grasos”.

Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), durante el periodo de enero a junio del año pasado, las defunciones por enfermedades del corazón fueron la primera causa de muerte a nivel nacional, con más cien mil casos. Tan solo en Baja California Sur al menos 500 personas fallecieron en ese periodo por dicha causa.

“Existen las grasas trans, este tipo de grasas son las que son más perjudiciales para nuestra salud, son las que deberíamos evitar en nuestro consumo lo más que podamos, los tipos de estas grasas están contenidas en papitas, frituras y sobre todo los alimentos que están super industrializados a grandes escalas, entonces lo ideal es no consumirlas a cualquier edad, pero especialmente personas alrededor de los 40 y 50 años, que son quienes tienen mayor riesgo cardiovascular de sufrir un infarto”, de acuerdo con la doctora Guadalupe Monroy, de la Secretaría de Salud.

Aunque la medida obedece a recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), será la propia Secretaría de Salud quien establezca las bases para regular los ácidos grasos de producción industrial bajo este precepto.

Isabel Mercado