Patrulla Oceánica “Hidalgo”, de última generación y 100 por ciento mexicana

0
79

Ensenada, B.C. 28 Nov (Notimex).– Con mano de obra 100 por ciento mexicana y una tripulación altamente capacitada, la Secretaría de Marina-Armada de México (Semar) alista la entrada en operación de la Patrulla Oceánica ARM Hidalgo PO-166.

La tripulación está compuesta por 84 elementos, de los cuales cinco son mujeres, y todos dieron seguimiento a la construcción desde la puesta de quilla, el 18 de noviembre de 2015, para constatar, de acuerdo con el Comandante de la nave, Daniel Durante Nava, que lo hecho por los mexicanos “está bien hecho”.

“Son manos mexicanas las que participaron en la construcción, obviamente hay tecnología adquirida, pero lo construyó el personal, desde almirantes, capitanes, oficiales, clases de marinería y personal civil”, aseguró, y admitió que si se tratara de autos, con toda proporción guardada, sería un modelo 2018 súper equipado.

En entrevista con Notimex, el capitán de Fragata Durante dijo sentirse con la confianza y seguridad de que la Patrulla Oceánica, que tendrá como sede el puerto de Ensenada, Baja California, está “muy bien hecha”, por lo que el compromiso de la tripulación es al 100 por ciento.

Los mexicanos pueden tener la seguridad y confianza de que estos barcos van a navegar por nuestras aguas para ejercer la soberanía nacional en la mar y para actividades de búsqueda y rescate, entre otras, con un personal altamente adiestrado, capacitado, responsable y “con mucha lealtad al país y a la institución”.

A su vez, el segundo comandante, el capitán de Fragata Roberto Carlos Reyes Aguilar, aseguró que pueden esperar de nosotros que podemos dar todo lo que esté a nuestro alcance para mantener la soberanía y defender los derechos de la nación, proteger nuestros mares y costas en México, para los mexicanos.

Sin ofrecer mayores detalles, reconoció que el costo de una Patrulla Oceánica de este tipo es muy alto, sin embargo, “el beneficio de salvar una vida vale más”.

Recordó que anteriormente estuvo, también de Segundo Comandante, en una Patrulla Oceánica que el 3 de abril de 2015, en Viernes Santo, rescató a David Mejía Córdova en Progreso, Yucatán, tras tres días de naufragio, con lo cual le salvó la vida.

Aclaró que “encontrar a una persona humana en el amplio mar es complicado”, pero en la madrugada de ese Viernes Santo, un elemento “que tiene ojo de halcón” avistó a la persona que iban a rescatar, dormido y asido a una tabla.

David Mejía Córdova había salido a pescar el 30 de marzo con tres personas más en las costas de Yucatán, pero su embarcación se averió y empezó a hundirse, sus tres compañeros se sujetaron a una nevera y al ser rescatados dieron el aviso de que todavía faltaba un náufrago.

El capitán Roberto Carlos Reyes Aguilar relató que tras el aviso, la Patrulla Oceánica que tripulaba, que se encontraba en Veracruz, ocupó nueve horas en llegar al rescate, por lo cual, insistió, más allá del costo económico de una nave, “el beneficio de salvar una vida, vale más”.

“Vale la pena el trabajo, es un granito de arena, que para eso estamos”, subrayó, al tiempo de mencionar que a pesar de sacrificar tiempo de estar en su casa, en sus familias los comprenden, los admiran “y siempre están orgullosos de los Marinos, del trabajo que realizamos”.

La Patrulla Oceánica “Hidalgo” que fue construida en el Astillero 20 de Salina Cruz, Oaxaca, y abanderada el 23 de noviembre, Día de la Armada, por el presidente Enrique Peña Nieto, usa el concepto de “trinomio”, es decir que es un buque que integra un helicóptero y una patrulla interceptora, ambos también de última generación.

El trinomio, de acuerdo con información de la Semar, permite ampliar el radio de acción en las operaciones realizadas, con un ahorro sustancial en los costos, lo que da oportunidad de incrementar el área de cobertura de vigilancia y se obtienen mayores resultados en la detección e intercepción de naves.

El buque “Hidalgo” tiene autonomía para pasar hasta 30 días en altamar sin tocar puerto, cuenta con dos lanchas de salvamento inhundibles, y con la patrulla interceptora, que alcanza una velocidad de 50 nudos (100 kilómetros por hora), y ha sido mejorada para optimizar sus capacidades operativas en la mar.

Adicionalmente, al igual que las demás Patrullas Oceánicas, integra un cañón que en este caso usa proyectiles de 57 milímetros, capaz de lanzar 220 disparos por minuto y un alcance efectivo de siete kilómetros, que regularmente sólo se utiliza dentro del Programa Anual de Prácticas de Tiro, pues no hay un antecedente reciente de su uso en alguna operación marítima.