Así se prepara un piloto aviador de la Base Aérea Militar No. 9
Foto: Bismarck Moyrón
La mañana del jueves 16 de noviembre, en las instalaciones de la Base Aérea Militar No. 9, ubicada en la carretera Transpeninsular, el teniente de la Fuerza Aérea, Juan Carlos Galván García, quien pertenece al Escuadrón Aéreo No. 106 de la ciudad, compartió la “Historia de vida del piloto aviador”.
Comentó que la formación de un piloto se inicia en la Escuela Militar de Aviación (EMA), en la cual pueden ingresar hombres y mujeres, y donde se otorga una beca durante la estancia como cadetes, estudiando un periodo de 4 años en los cuales se enseñan diversas técnicas y teorías sobre vuelo.
“Actualmente son cuatro años de escuela, en los cuales el primer año es de teoría de la aviación; en el segundo año, se empieza a volar y los cadetes de la escuela Militar de Aviación empiezan a hacer sus primeros cimientos de lo que es la aviación en una aeronave Cessna 182; en el tercer año, se crean otras maniobras un poco más acrobáticas, vuelos en formación, vuelos nocturnos, en un avión Grob 120 TP y en el último año se crea el vuelo táctico”.
Al concluir la carrera profesional se confiere la jerarquía de subteniente de Fuerza Aérea y el título como Licenciado en Administración Militar en Piloto Aviador, para ser asignados a los Escuadrones Aéreos con los que cuenta la Fuerza Aérea Mexicana.
El teniente Juan Carlos Galván mencionó algunas de las misiones que manejan los escuadrones aéreos de la Fuerza Americana y compartió lo que más le gusta de ser Piloto Aviador.
“Las misiones que se llevan a cabo en los escuadrones aéreos de la fuerza americana son diferentes, pues tenemos el reconocimiento y el apoyo para el plan DN-III. Lo que más me gusta es el vuelo, el estar allá arriba, la adrenalina, tener a cargo una aeronave de la Fuerza Aérea mexicana y salvaguardar sobre todo el espacio aéreo nacional”.
El plan DN-III es el operativo militar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para que el Ejército y Fuerza Aérea realicen actividades de auxilio a la población civil afectada por desastres de origen natural.
