“Si no hay de otra a dejar al casa en contingencia”: vecina del vado de Santa Rosa
San José del Cabo.- Luego de los posibles pronósticos de lluvia en el municipio de Los Cabos derivado de las bandas nubosas de ‘Narda’, Rosa Cabrera Rodríguez, vecina de la invasión de Santa Rosa compartió para CPS Noticias, que ante cualquier pronóstico de lluvia se prepara con su pequeña familia con algunos elementos esenciales como veladoras y agua, pero si las autoridades les advierten de resguardarse en algún refugio temporal y ven necesario, proceden a evacuar su casa y refugiarse con algún familiar.
“Nosotros nos preparamos, mi hija, mi mamá y yo, por lo que tratamos de tener lo necesario con veladoras, agua y demás, pero si vemos que hay riesgo, pues obvio nos tenemos que salir, buscar a ver dónde, porque dos veces nos ha tocado muy difícil aquí, lo bueno es que no nos había tocado que estuviera mi mamá, pero sí ha estado medio difícil porque es el arroyo por este lado y también por el otro y sí nos representa bastante riesgo”.
Compartió que afortunadamente nunca ha llegado el nivel del agua hasta su hogar, pero sí le causa incertidumbre, ya que hasta la fecha, el límite han sido dos terrenos antes de su hogar.
La señora Rosa, aconsejó a las familias que en especial tienen niños pequeños, a no permanecer en sus hogares durante alguna contingencia, ya que es más complicado salirse en medio de los fenómenos meteorológicos.
“Para mi hija y yo no nos es tan complicado pasar las lluvias aquí, porque si vemos necesario, solo nos agarramos de la mano y nos echamos a correr, pero los que tienen niños chiquitos pienso que no deberían de estar aquí en tiempo que se pone difícil con las lluvias, porque es más complicado salir a la hora de la lluvia y del viento, que es a lo que más miedo le tengo”.
Además, nos compartió la experiencia que vivió con su hija con la tormenta tropical ‘Lidia’ en 2017.
“En esa temporada sólo estaba mi niña y yo, por lo que pensamos que sí podíamos pasar la contingencia en mi casa ya que aquí contamos con un pequeño cuarto de material, y procedimos a juntar el agua necesaria, veladoras y comida, luego nos encerramos pero a mí nunca se me había ocurrido ver por arriba del techo y me percaté que venía demasiada agua, y ahí fue cuando volteé a ver a mi hija y le digo ‘no, no vamos a poder, va a subir demasiado el agua’, y a la hora de la lluvia cuando estaba todo, nos salimos e íbamos muy asustadas y para nuestra buena suerte nos encontramos a una persona que nos llevó a una lavandería y ahí pasamos la contingencia. Cuando regresamos a la casa, todo se veía normal y creímos que no había pasado nada, pero cuando fuimos a ver al margen del arroyo, vimos que se había llevado demasiadas casas.
Compartió que ella y su hija se encontraban sanas y a salvo tras la contingencia, pero en su casa todos los techos se habían volado, los cercos quedaron al ras del suelo y todo dentro de su vivienda se encontraba mojado, ya que su cuarto en ese entonces era solo de madera y lámina.
Sin duda, dijo, en esa ocasión se llevó una dura experiencia, afortunadamente no les pasó nada, pero de ahí, ha sido más consciente y cuando ve necesario, se salen de su casa para resguardarse mientras pasa la contingencia.