Real politik

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Columna Carlos Rojas Magnón

Aunque Xóchitl ha despertado una gran esperanza de quitar a Morena del poder y sus simpatizantes rebasan los de Paredes y Creel, el triunfo no se ha logrado.

Lo más difícil para Xóchitl será enfrentarse al “fuego amigo” proveniente del traidorcillo Elito y el anti líder Marko Cortez.

El primero es la persona más repudiada por el PRI y que mantiene su puesto a base de trampas, siendo ahora nefasto en el Frente por querer meter a Beatriz Paredes usando al partido, no obstante saber que sería vencida.

El anti líder del PAN, por compromiso anterior de apoyar a Creel, lo apoya en la misma forma sin aceptar que, no obstante a su experiencia, es un perdedor.

Ambos sujetos no se han dado cuenta que están en un Frente unido, no en sus partidos ya gastados y desprestigiados.

Es inaceptable que el futuro de México esté en manos de dos payasos con Intereses ocultos, peleados y repudiados por sus respectivos partidos, y no apoyando a la ganadora visible del Frente sino a sus candidatos particulares, seguramente perdedores.

Inconcebible que el posible triunfo de Xóchitl, habiendo demostrado un gran entusiasmo y un apoyo popular absoluto y siendo la posible y única ganadora a Morena, esté batallando contra su mismo equipo, como sus grandes enemigos.

Habrá sesión de opiniones, conteo de votos pero el factor de popularidad nacional no tiene medición y debe ser considerado, si es que el objetivo principal es ganar las elecciones.

Xóchitl lo tiene muy alto, por sus atributos personales, apartidismo y autenticidad.

Paredes y Creel están irremediablemente ligados a sus partidos, con aciertos, errores y corrupción, lo que los hace poco atractivos en este momento.

Xóchitl tendrá que sortear la “real politik”, como la define nuestro querido amigo Ramon Loaiza y demostrar su capacidad, llegar a acuerdos para lograr el apoyo de estos sujetos y las camarillas de los partidos, prometiéndoles puestos o prebendas a cambio del apoyo, gracias a la coalición.

No podemos evadir que está en juego la Presidencia de la República en donde hay que repartir un pastel que no existe todavía, entre los participantes del intento.

Seguramente lo sabremos en unos días y definiremos el futuro de México.

“Real politik”

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