Habrá sanciones para empresas que incumplan con la denominada “Ley Silla”

Desde el primer minuto de este martes 17 de junio, comenzará a aplicarse la llamada “Ley Silla”, una reforma a la Ley Federal del Trabajo que busca mejorar las condiciones laborales de millones de trabajadores en México. La iniciativa contempla sanciones económicas significativas para las empresas que no garanticen el derecho a descansar sentados durante la jornada.

De acuerdo con lo establecido en la reforma, todas las empresas del país deben proporcionar asientos adecuados y funcionales a sus empleados, particularmente en actividades donde no es estrictamente necesario permanecer de pie. Esta disposición incluye tanto a oficinas como a centros de atención al público, comercios, restaurantes y servicios de vigilancia.

Las modificaciones a los artículos 132 y 133 de la ley obligan a los patrones a facilitar sillas con respaldo a personal como cajeros, panaderos, chefs, cocineros, guardias de seguridad, meseros, personal de limpieza, taquilleros y otros trabajadores que tradicionalmente han laborado de pie durante toda su jornada.

Las empresas tuvieron un plazo de 180 días naturales para modificar sus reglamentos internos y cumplir con la “Ley Silla”, tras publicarse en el Diario Oficial de la Federación, lo cual ocurrió el 19 de diciembre de 2024. El objetivo principal es prevenir problemas de salud como várices, fatiga muscular, dolor de espalda y desgaste en las articulaciones, padecimientos comunes entre quienes permanecen de pie por horas.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) deberá emitir en un plazo de 30 días nuevas normas oficiales sobre riesgos posturales, con el fin de reforzar la aplicación de esta ley y evitar interpretaciones ambiguas que limiten su alcance.

Las sanciones por incumplir esta disposición van desde 250 hasta 2 mil 500 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA), lo que representa multas que oscilan entre los 28 mil y más de 280 mil pesos. En casos graves o reiterados, incluso podría ordenarse la suspensión temporal de operaciones en los centros de trabajo.

La Ley Silla también busca erradicar prácticas laborales que por décadas han puesto en riesgo la salud de los trabajadores, muchos de los cuales —hasta un 45% según estimaciones— pasan toda su jornada sin sentarse, aun en momentos de inactividad.