Puentes peatonales, arma de doble filo para los transeúntes

En los últimos años, las zonas urbanas han dado prioridad al movimiento de vehículos motorizados, dividiendo el espacio público a través de vías rápidas, puentes y pasos a desnivel.

Dichas obras no consideran en lo absoluto el derecho a la movilidad y la ciudad de los habitantes, así lo informó Alejandro Chavéz, integrante del Colectivo de Ciclismo Urbano A.C., argumentando que estas herramientas no funcionan para los peatones pues los obligan a desviar las líneas de trayecto hasta donde se encuentran los puentes, lo que implica más tiempo y esfuerzo.

Aunado a esto, tienen un diseño poco amigable para usuarios vulnerables como niños, personas de la tercera edad o personas con discapacidad:

“Los puentes peatonales, más que peatonales son anti personales. No tiene mayor derecho un conductor a un peatón como para que al peatón lo obliguen a caminar 200 metros más para que el automovilista cruce rápido”, expresó.

Además de que los puentes peatonales no cumplen con su objetivo de salvar vidas, pues un estudio realizado en el 2008 por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), reveló que 26.68 % de los accidentes ocurre a menos de 300 metros del los puentes peatonales.

La construcción de puentes “antipeatonales” tiene una lógica de ingeniería urbana que favorece el desplazamiento de los vehículos de automotores y no de prevención de lesiones.

Refirió que el colectivo sin fines de lucro busca implementar mejoras en la infraestructura vial de la capital del estado, con el objetivo de preservar la integridad del peatón:

“Estamos impulsando que se quiten los puentes peatonales “anti peatonales” y se hagan cruces seguros que ha demostrado ser mucho más efectivo para el fluido tránsito de los vehículos y al mismo tiempo la seguridad de los peatones” puntualizó.

En La Paz, las altas velocidades son la principal causa de siniestros viales.

Ante los últimos sucesos lamentables sobre la vía pública, el director de movilidad y transporte declaró que como una estrategia para reducir el índice de letalidad por esta causa, se plantea implementar dispositivos que permitan multar a los vehículos motorizados que circulen a exceso de velocidad.

Un claro ejemplo de esto es el bulevar forjadores. zona que se ha visto involucrada en escenarios catastróficos para los transeúntes al ser una vialidad que prioriza el paso de los vehículos a exceso de velocidad.