AICM pierde juicio por 229 millones de pesos tras fallo judicial que invalida pruebas de la FGR

El Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México enfrentó un revés judicial de alto impacto económico luego de que un tribunal federal absolvió a exfuncionarios y a un particular acusados de un presunto fraude por 229.3 millones de pesos, relacionado con supuestos trabajos simulados de mantenimiento en equipos de seguridad. La resolución dejó sin efecto la acusación de la Fiscalía General de la República al considerar ilícita una de sus pruebas centrales.

El caso se centró en contratos de mantenimiento para sistemas de seguridad instalados en las terminales 1 y 2 del AICM, considerados críticos para la operación aeroportuaria. La FGR sostenía que cinco funcionarios y un proveedor particular simularon servicios que nunca se realizaron, generando un daño patrimonial millonario al principal aeropuerto del país.

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La acusación incluía el mantenimiento de un amplio parque de equipos especializados, entre ellos 72 máquinas de rayos X, 22 detectores de metales tipo pórtico, 61 detectores de trazas de explosivos y 16 sistemas de detección por tomografía, todos fundamentales para los controles de seguridad aérea y el cumplimiento de estándares internacionales.

Para sustentar el presunto fraude, la Fiscalía recurrió a una comunicación directa con la empresa estadounidense Leidos, fabricante de parte de los equipos señalados. En esa respuesta, la compañía afirmó no tener certeza de que los detectores hubieran recibido el mantenimiento especializado que supuestamente fue contratado, un elemento que la FGR consideró clave para acreditar la simulación de servicios.

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Sin embargo, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia de Apelación de la Ciudad de México determinó que dicha prueba fue obtenida de manera irregular. El órgano judicial consideró que la Fiscalía debió solicitar la información a través de un mecanismo formal de asistencia jurídica internacional y no mediante un simple correo electrónico, como ocurrió en este caso.

La forma en que se recabó la carta fue suficiente para que el tribunal declarara la ilicitud de la prueba y, en consecuencia, desestimara el sustento central de la acusación. Al quedar sin validez uno de los pilares del expediente, los magistrados resolvieron absolver a los imputados y cerrar el proceso penal en su contra.

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El fallo evidenció las debilidades procesales de la investigación y colocó en entredicho la estrategia jurídica de la FGR en un caso de alto perfil y cuantioso monto. Más allá de la absolución, la resolución deja abierta la discusión sobre la capacidad del Estado para acreditar delitos complejos cuando no se cumplen con rigor los protocolos legales.

El desenlace judicial también genera cuestionamientos sobre los mecanismos de control y supervisión en contratos de mantenimiento de infraestructura crítica en el AICM, un aeropuerto que ha estado bajo constante escrutinio por su saturación operativa y por la relevancia de sus sistemas de seguridad en el contexto nacional e internacional.

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