Ambulantes señalan que el verdadero problema es el “golondrinaje”

Adrián Mendoza López, secretario general de la Confederación Obrera Revolucionaria (COR) en Baja California Sur, dijo que vendedores ambulantes empadronados en el Ayuntamiento de Los Cabos, ya están cansados de ser la piñata de todos, ya que está agrupación sólo ha recibido golpe tras golpe, cuando lo único que hacen es apegarse a las normas que la autoridad impone.

Así mismo dijo, que instancias gubernamentales, sólo se han dedicado a señalar y criticar a este gremio, sin voltear a ver el verdadero problema de los vendedores sin permiso, denominados “golondrinos”.

En vez de ensuciar la imagen de quienes buscan la manera digna de trabajar, autoridades e iniciativa privada deberían incluir a quienes ejercen esta actividad económica en las mesas de trabajo para que dejen de satanizar a los verdaderos comerciantes de playa y conozcan su realidad.

Molestó refirió que autoridades municipales están en un error al señalar a los vendedores ambulantes como causantes de un pleito registrado días atrás en la playa emblemática de CSL, los actores de esta mala imagen fueron personas dedicadas a otras actividades económicas ajenas al ambulantaje, en cuanto a que había más vendedores ambulantes que turistas dijo.

“Esta época del año es conocida como la temporada baja, así que en agosto y septiembre pasa lo mismo que todo el tiempo y quienes vivimos aquí y trabajamos del turismo sabemos que eso pasa con pandemia o sin pandemia”.

Dijo de manera muy clara que la playa efectivamente estaba invadida de vendedores ambulantes pero “golondrinos”, es decir que no están dentro del padrón del Ayuntamiento de Los Cabos, así mismo criticó que es increíble que mientras la autoridad tiene frenado a los empadronados en este nivel de alerta sanitario que ya cambio a nivel 4 los comerciantes sin permiso hacen de la suyas en la playa.

“Tenemos un rol de entrar cierta cantidad de personas y de acuerdo a la autoridad, sólo pueden ingresar a la playa el 20% del padrón existentes lo que corresponden entre los 90 y 100 vendedores, ya que la capacidad que se tiene registrada de manera normal en el Médano es de 500.”

“Ahora ya estamos en el nivel cuatro y el aforo debería de ser del 40% sin embargo no es así, así que el gobierno en vez de acusar debería de reconsiderar su conducta y ayudar a los verdaderos vendedores ambulantes”.