Balacera en Jalisco provocó pánico en Kinder
- Durante la mañana de ayer se desató el pánico en un kínder que quedó en medio de la balacera en la Colonia Las Huertas
Guadalajara.- Los brazos fue todo lo que tuvieron padres de familia para proteger a sus hijos, luego de recogerlos en el kínder Cipriano Campos, el cual quedó en medio de una balacera ayer, en la Colonia Las Huertas.
Durante casi hora y media, los estudiantes del plantel, ubicado en la Calle Jacaranda, entre Guayaba y Privada Aceituna, fueron resguardados por sus maestros, quienes los pusieron debajo de sus mesas y trataron de calmarlos.
#VIDEO: La reacción de esta maestra fue clave para mantener en calma a sus alumnos durante la balacera que ocurría este viernes junto al jardín de niños en que se encontraban. Ocurrió en Las Huertas, en Tlaquepaque 🎒👏 pic.twitter.com/8jdh9mdOhL
— 𝐄𝐋 𝐈𝐍𝐅𝐎𝐑𝐌𝐀𝐃𝐎𝐑 (@informador) March 7, 2020
Los niños iban a salir antes de las 11:30 horas, pero cerca de las 11:00 comenzaron los disparos.
Afuera del plantel ya estaban algunos padres de familia, así como tres vendedoras de dulces esperando a los estudiantes, algunos de los adultos alcanzaron a meterse al kínder. Martha Patricia, una de las comerciantes, recibió un impacto en la rodilla.
De acuerdo con habitantes de Las Huertas, los disparos se escucharon por alrededor de media hora.
Padres y madres de familia llegaron desesperados y fueron guiados por policías de Tlaquepaque, uno por uno, para caminar pegados a la pared, sacar a sus niños y alejarse. Hubo adultos que optaron por taparles la cara a los pequeños para evitar que vieran la movilización policíaca.
Sergio “R”, de 43 años, estaba a unos metros del kínder, visitando a su mamá cuando escuchó los disparos. Según testigos, él corrió a la casa de su hija, ubicada a unas cuadras, para avisarle que no saliera, pero las balas lo alcanzaron cuando llegó a la Calle Catalina y murió.
“Le dijimos a su hija que no saliera porque está embarazada y ella se enojaba que porque no hacíamos nada por ayudar a su papá”, recordó una vecina.
En la escuela Expropiación Petrolera, situada en las calles Fresa y Perón, aproximadamente a 5 cuadras de dónde fue la balacera, los niños también fueron resguardados.
“Estábamos en el recreo cuando se escucharon los balazos y metimos a todos al salón, sin decirles nada , sin mencionarles para qué, trabajaron tranquilos sentados en el piso”, recordó el director del plantel.
Él le llamó a la Policía de Tlaquepaque y les pidió que le avisaran cuando fuera seguro salir.
Finalmente, a las 13:00 horas, los niños fueron entregados a sus padres.