Casa abandonada se convierte en guarida de maleantes

Sobre la calle Constitución, entre Manuel Altamirano e Ignacio Ramírez, se ubica una casa que mucho tiempo atrás podía presumir de su bella fachada. Desde hace más de diez años la vivienda no es habitada, lo que provocó que se deteriorara y fuera utilizada para otros fines.

De acuerdo con los vecinos quienes prefirieron el anonimato, comentaron que hace alrededor de cinco años, personas de procedencia desconocida comenzaron a invadir la casa, y con el paso del tiempo, fueron desmantelanda y destruyendo el interior del lugar.

“Tenemos mucho tiempo reportando, hay dos o tres delincuentes ahí, bien agresivos. Ahí se drogan, roban las cosas y ahí las seleccionan y dejan así el basurero. Hay un muchacho muy agresivo que nos han amenazado de muerte[…] han quemado tres veces en caso de que vuelvan otra vez y a quién le vamos a cobrar con nuestro patrimonio con tantos sacrificios que lo hemos tenido.”

“Hace poquito también hubo un pequeñito incendio, pero no hacen caso. Es un foco de infección para todos los vecinos y de inseguridad, sobre todo, porque a veces en la noche uno está estacionado, ya te están gritando cosas y no sabes ni quién y la policía viene cuando no están o tienen que venir o muy temprano ya muy noche.”

De acuerdo con los habitantes del lugar, ya se han hecho reportes a Servicios Públicos Municipales y Protección Civil Municipal de La Paz, pero, al parecer, no han procedido por ser propiedad privada. Mientras tanto, la casa seguirá funcionando como punto de reunión para los criminales.

Esto fue lo que dijo la ciudadana Tatiana, quien transita por el área y ha visto cómo han tirado basura en el sitio.

“Era muy bonita casa y sé que hay gente que preguntaba si era muy bonito, si la venden o no la venden, pero no sé quién es el dueño […]da mucha lástima que está tan bonita la casa, ahorita está tan abandonada, esta terrible como se ve aquí en la calle y quieren estar responsable de esta casa¿quién es dueña? Yo no tengo idea.”

Cabe destacar que a un costado de la casa se encuentra un edificio en obra negra, el cual ha sido utilizado por los maleantes como acceso de ingreso a las viviendas aledañas, ya que una parte de la barda está agrietada e inclinada sobre la banqueta.