Vecinos de la colonia Colinas del Sol no soportan el olor del derrame de aguas negras
Vecinos de la colonia Colinas del Sol, expusieron su molestia por la corrida de agua de drenaje que se mezcla con las fugas de agua potable en cuatro puntos diferentes sobre la calle Norte, la cual tras varios años de reportes y denuncias que presentaron con los funcionarios públicos, las autoridades continúan sin atender el llamado de este sector de la población.
Dichas corridas de agua se encuentran sobre la calle Norte, poco antes del cruce con la avenida Revolución de 1910. Los habitantes de esta zona deben lidiar con frecuencia los estancamientos de las aguas que en ocasiones, deben saltar con piedras para evitar ensuciar su calzado.
Los colonos, preocupados por la salud de sus familiares, dieron a conocer el fétido olor no cesa con el pasar del tiempo, pues éste se filtra al interior de sus domicilios aunque estos permanezcan cerrados.
“Nosotros tenemos mucho tiempo con el problema del drenaje. Por mucho tiempo hemos reportado todas las fugas de drenaje y de agua. Tenemos dos meses reportando esta fuga de agua, lo hacemos cada tercer día. Aquí ya tenemos arroyos y todo el tiempo está así”, comentó Jesús Talamantes.
“Cuando está calmo, es cuando huele más. En tiempo de calor me quedo aquí, en el patio de mi casa, que está en la esquina de la calle, y nos tragamos todo el olor. Todos los vecinos nos hemos juntado a pedir apoyo, pues el problema ya tiene años, desde el gobierno de atrás. Aquí vino el otro gobernador, Davis, estuvo y prometió pero no cumplió”, indicó Filiberto Espinoza.
Sobre este problema, la señora Rosalía, comerciante cercana al desagüe, indicó estar preocupada por el problema de higiene que representan las fugas para su negocio que se encuentra a unos metros, mismo que ha cerrado en reiteradas ocasiones por el estado insalubre del ambiente.
“También es una falta de higiene. Cada vez que vamos a comer el olor es insoportable, no podemos comer nuestros alimentos por toda esta peste de aguas negras. Yo tengo un cafecito aquí a media cuadra. A veces tengo que cerrar porque no puedo vender mis alimentos con todo este porquerillero, entonces, la gente no se acerca y yo prefiero cerrar porque no es higiénico vender alimentos cuando está corriendo agua sucia”, expresó Rosalía Rodríguez.
“Esta es una mala imagen pública, se ve mal. El problema viene de allá, desde el panteón. Todos los olores de drenaje no son nuevos, como le digo yo, no soy ingeniero ni nada, pero aquí nací, sé que la tubería ya no da abasto, ya es vieja. Son tuberías muy angostas las que se metieron por el panteón”, comentó un vecino.
Los residentes, desesperados por lograr que alguna autoridad los escuche y resuelva las fugas antes de que inicie la temporada de calor en la ciudad, buscarán alguna otra vía para ser atendidos.