Evita lesiones musculares al ejercitarte y sigue los consejos de especialistas

El error más común que suelen cometer las personas que empiezan a ejercitarse, e incluso, quienes realizan actividades físicas con frecuencia, pero, dejaron de hacerlo porque se contagiaron de covid-19 o se mantuvieron en aislamiento por temor a contraer el virus, es forzar su cuerpo con rutinas muy demandantes.  

El Licenciado en Fisioterapia, Eduardo Peña, sostuvo que seis de cada diez pacientes que llegan a su consultorio por lesiones musculares, es porque hicieron una rutina inadecuada, aumentaron el peso de carga de forma excesiva para lo que venían haciendo, o disminuyeron el tiempo de ejercicio pero elevaron la exigencia de la rutina. Destacó que lo más importante para evitar estas situaciones es retomar o iniciar el entrenamiento de forma progresiva.

“Es muy fácil decir -El primer día voy a correr 10 kilómetros-, cuando no hemos corrido en meses o años, y al siguiente día estas todo adolorido y no puedes volver a entrenar, entonces lo principal es hacerlo de manera progresiva, paulatina y sobretodo acercarse con un profesional del ejercicio”, explicó.

Otros factores que son de gran importancia es contar con la asesoría de un entrenador profesional, calentar antes de una rutina y estirar al terminar; y sobre todo, no andar a las carreras y darte el debido tiempo para entrenar. Esto no quiere decir que las rutinas de 20 minutos sean incorrectas, sino que depende de quien las realice y lo que acostumbre a ejercitar, es el tiempo que debe dedicar a esta actividad. 

“Está la cultura de que ‘entre más cargues más vas a fortalecer’ o ‘tienes que cargar hasta que ya no puedas’, inclusive entre los mismos grupos de entrenamiento te dicen -No cargas nada- y por la carilla se te ocurre subir el peso y ahí vienen las lesiones. Y es muy común que lleguen con molestias por haberse pasado más allá de los límites que tenía su cuerpo en ese momento”, agregó. 

 Las lesiones más comunes son dolor de espalda, malestar en las rodillas por una mala ejecución del ejercicio; y las más severas son daños en los tejidos como desgarres musculares o ruptura de ligamentos.