Ganaderos de Baja California Sur enfrentan sequías severas

Baja California Sur sufrió una de las sequías más severas de su historia entre 2020 y 2022, poniendo en riesgo a los ecosistemas y comunidades rurales que dependen de ellos. Un estudio liderado por Shane Macfarlan, Sula Vanderplank, Benjamin Wilder y Exequiel Ezcurra reveló cómo los rancheros tradicionales respondieron a esta crisis climática y qué oportunidades existen para garantizar su sostenibilidad.

El estudio de caso fue realizado en colaboración con la Universidad de Utah, SUVA Research, la Nueva Generación de Investigadores del Desierto Sonorense e Innovaciones Alumbra. En total, se entrevistó a 98 rancheros tradicionales de la Sierra de La Giganta y la Sierra Cacachilas.

Adaptación en tiempos de crisis

De acuerdo con la investigación, la sequía dejó una serie de problemas: pérdida de vegetación, inseguridad alimentaria y disminución de ingresos. Sin embargo, los rancheros lograron salir adelante. Algunos de los aspectos que se observaron en el análisis fueron los siguientes.

• Estrategias alimenticias: Aumentaron el uso de alimentos comprados, como alfalfa, para asegurar la supervivencia del ganado.
• Impacto económico: Los ranchos con títulos de propiedad lograron recuperarse más rápido que aquellos sin documentación.
• Recuperación ecológica: La Sierra de La Giganta Norte mostró una mayor recuperación de los ecosistemas tras las lluvias de 2022.

Preocupaciones por el futuro

Aunque pudieron sobreponerse a esa crisis, para los ganaderos de Baja California Sur, el panorama sigue siendo incierto. El 68% de los rancheros teme que una nueva sequía prolongada los obligue a abandonar su actividad en menos de tres años.

Soluciones y oportunidades para los rancheros

El estudio destaca propuestas para fortalecer la resiliencia de estas comunidades:

• Diversificación de ingresos:
  • El 97% de los rancheros expresó interés en participar en proyectos de conservación.
  • El 90% estaría dispuesto a explorar iniciativas de turismo rural para generar ingresos adicionales.
• Mejoras en infraestructura agrícola: Incrementar la capacidad de producción y almacenamiento de alimento es fundamental para enfrentar futuras crisis.
• Apoyo gubernamental: Los rancheros solicitan programas que impulsen el empleo y mejoren las condiciones de infraestructura rural.

Tras analizar los desafíos que enfrentan las comunidades rurales de Baja California Sur, los investigadores concluyeron que se deben desarrollar políticas públicas que aseguren el futuro de la cultura ranchera y la biodiversidad de la región.