Reservado diagnóstico del águila calva en Los Cabos; presentaba una seria desnutrición, deshidratación y parasitosis
Ligia Romero Gutiérrez
Cabo San Lucas.- Saúl Collins Ortiz, delegado federal de Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en el estado, manifestó que el hallazgo del águila calva en la región de Los Cabos, se encuentra en un proceso de recuperación con un diagnóstico reservado, esperando en unas semanas llevar la valoración que determinará si el animal puede regresar a su hábitat natural o quedar en cautiverio.
Explicó que el ave esta resguardada en el zoológico de Santiago, presentando un serio cuadro de deshidratación, desnutrición y parásitos, por lo que autoridades de Profepa están abocados en la salud de esta especie, el caso va por muy buen camino, ya que su recuperación es muy notoria.
Añadió que a pesar de la recuperación del águila calva, no pueden cantar victoria todavía, “por lo que el pronóstico del animal aun es reservado”.
Reveló que el ejemplar fue encontrado con una baja considerable de peso; no especificó el dato del antes y después del hallazgo, sin embargo insistió que su mejoría es notoria.
Dijo que ya recuperada el águila calva se llevará a cabo una análisis completo para determinar si es apta para liberarla, es decir, determinar qué tan habituada está al ser humano y si al final se descubre que sí puede regresar a su hábitat natural, se procederá con su rehabilitación para después soltarla.
Puntualizó que en caso de que el animal tenga que quedar en cautiverio, se buscará el espacio idóneo para resguardarla y del cual se llevará un estudio previo al respecto.
Al cuestionarle sobre el tiempo que llevaría liberarlo de continuar con esta evolución, dijo que todo depende del águila calva, “no podría dar un plazo, pero no es muy tardado, ya que la rehabilitación no es muy complicada”.
Detalló que hay registro de que el hábitat natural de estas especies abarca la península de Baja California Norte y Sur; encontrándose en Bahía Magdalena y Adolfo López Mateos.
Agregó para concluir, que es la primera vez que Profepa atiende a un ejemplar de este tipo, pues anteriormente habían atendido a otras aves rapaces, como un halcón peregrino.