Impunidad en secuestro de Víctor Peralta en Comondú

El empresario Víctor Peralta, fue secuestrado, torturado y amenazado de muerte antes de ser obligado a firmar un documento donde cedía todos sus bienes a su esposa e hijos quienes orquestaron el plan para quedarse con todas las propiedades de la víctima
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Empresario Víctor Peralta, de Comondú

Luego de tomar la decisión de dejar su querido municipio de Comondú para buscar un mejor porvenir y probar suerte en los Estados Unidos, Víctor Peralta logró establecerse laboralmente y ahorrar una considerable cantidad de dinero que le permitió volver a Ciudad Constitución y abrir varios negocios propios para convertirse en un próspero empresario.

De acuerdo con sus declaraciones, de la noche a la mañana lo perdió prácticamente todo a causa de la avaricia y traición de sus propios familiares. Fue secuestrado, torturado y obligado a desprenderse de todos sus bienes. Su calvario, comenzó la madrugada del 28 de mayo del 2017 en el que hasta ese momento era su hogar.

“El 27 de mayo del 2017 llegué a Ciudad Constitución a las 7 de la tarde, ya estando ahí vi la casa sola, llegué y me acosté a dormir porque venia de muy lejos manejando. Como a las 4 de la madrugada sentí algo muy pesado en mi cara, y cuando despierto eran 6 personas encapuchadas que me tenían amarrado en mi cama. De ahí me sacaron y subieron a una camioneta blanca. Al rato escuché que se abrió un portón y me metieron a un cuarto donde me tuvieron como una hora y me dijeron que estaba en un centro y que mi mujer había mandado hacer eso, y yo les dije ¿y por qué? Si yo no soy drogadicto ni borracho, y me dijeron -pues no me importa, aquí te chin** cab*. Aquí nosotros somos la ley y aquí te cargó la chin**-“.

Víctor, pasó 5 días secuestrado en un centro de rehabilitación para adicciones ubicado en la zona centro de la cabecera municipal.

Dentro de las instalaciones, sufrió agresiones físicas y psicológicas a cargo del grupo de plagiarios que por medio de amenazas de muerte lo obligaron a firmar un documento donde cedía todas sus propiedades y negocios a la que en ese momento era su esposa y madre de sus hijos, Virginia “N”. La firma de la otorgación de sus bienes, según sus secuestradores, era a cambio de su libertad.

“Me estuvieron torturando hasta que les firmé un documento notariado donde yo les entregaba las propiedades, me salía de mi casa y me iba de ahí. El 2 de abril, les firmé después de 5 días pagando mi rescate con mis propiedades, de ahí salí y anduve batallando unos días hasta que me acomodé y puse la demanda, y cuando fui a poner la demanda empezaron los problemas porque el ministerio público dijo que no era secuestro porque yo había pagado mi rescate personalmente, que nadie lo pagó por mí.

De ahí me empecé a enfrentar al monstruo de la corrupción porque todo se complicó, como me habían dicho los secuestradores que tenían comprados jueces. Y se ha visto porque hasta la fecha he andado luchando contra este monstruo de la corrupción”.

Esposa e hijos, los orquestadores del secuestro

De acuerdo con la denuncia con expediente CST/651/2017, el grupo de secuestradores se trató de su propia esposa Virginia “N”, su hija Osiris Anahí “N”, su hijo Edwin “N”, un notario público identificado como Marco Antonio “N” y un cómplice de la familia de nombre Francisco Javier “N”, los que retuvieron al empresario en el centro hasta conseguir su propósito, quedarse con su casa, sus vehículos particulares, yardas de venta de autos, un local de venta de computadoras, tiendas de ropa y una papelería con servicio de café internet, que estaban a nombre de la víctima.

Pese al testimonio y presentación de pruebas del afectado ante las autoridades penales, la justicia no ha llegado a 6 años de distancia del suceso en el que fue envuelto en un maquiavélico plan para quedarse prácticamente en la calle.

“Mi caso ha sido un caso de corrupción fuerte, lo tengo todo documentado, como han sucedido los hechos, como suspendían las audiencias, como he logrado sentencias y ellos siguen igual. No me han devuelto lo mío, ni siquiera han caído en la cárcel ninguno de ellos, los sentenciaron y se declararon culpables, y tampoco les hicieron nada y no les dieron ni cárcel. Total, que yo sigo luchando para poder conseguir lo mío y no he podido lograr nada.”

Según el comerciante comundeño, el monto de todos bienes perdidos asciende a millones de pesos. Todos sus negocios y fuentes de ingresos ahora son operadas por sus secuestradores quienes se benefician de las ganancias económicas de las empresas que fueron construidas a base de su esfuerzo y perseverancia.

Debido a los seguimientos del caso, y la valoración de la denuncia, Víctor no puede pasar a menos de 20 metros del que era su hogar para no entorpecer las investigaciones en términos legales.

“Con todos los carros que había, todas las tiendas y todo como era un patrimonio familiar, como unos 6 millones de pesos, aproximadamente. Porque la casa vale 3 millones y medio. Total, que aparte de eso se quedaron con todo lo que era mío y lo han estado trabajando y siguen igual.

Ha habido demandas, se ganó un juicio civil, ellos me dijeron que cuanto el juicio civil se ganara con eso teníamos, cuando nos den la sentencia inmediatamente procedemos en contra de ellos y logramos todo. Fui, también les entregué la sentencia que cuento con ella, se abrió una carpeta por despojo, pero en todas las carpetas que ellos me han dicho abre esta carpeta, abre otra, pero es solo para hacer más tiempo y para no lograr nada”.

Víctor consiguió un cuarto de renta para poder dormir por las noches y se mantiene con los pocos ahorros que le quedaron en efectivo, los cuales guardó secretamente para evitar que también se le fueran arrebatados. Sin embargo, la impunidad con la que se ha manejado su situación lo ha orillado a mantener una pugna con las propias autoridades que se supone resolverían el caso a su favor.

Los detalles de la denuncia interpuesta por los delitos de los que fue víctima han pasado por juzgados del Sistema Penal Acusatorio de prácticamente todos los municipios de Baja California Sur a excepción de Los Cabos, donde los encargados de impartir justicia no han podido determinar el fallo a su favor para que se le sean devueltos sus bienes que le fueron retirados de manera violenta.

A pesar de que Víctor Peralta le ha entregado varias cartas explicándole el injusto caso al gobernador del estado, Víctor Castro Cosío, las cosas siguen igual y sin mostrar avances de carácter judicial.

El empresario decidió denunciar públicamente su tema para presionar a las instituciones penales con el objetivo de finalmente poder vencer al “monstruo de la corrupción.”

Imberth Rondero