TECLA 7/6: TIEMPOS RUDOS

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Remataría con la expresión: “Ya cierro el paréntesis, me provocaste”

 

El espíritu de Morena, recorría La Mañanera. Los señalamientos internos cupulares, de nueva cuenta en medio del proceso para elegir dirigente nacional, la advertencia de un frustrado aspirante de ir a tribunales electorales; el amago de otro aspirante por expulsar –de llegar a suceder a Ramírez Cuéllar—a un integrante del gabinete presidencial cuyo nombre ya se cita desde estas fechas entre los que estarían por la sucesión en el 2024.

Las exigencias de un núcleo de legisladores federales morenistas porque aclare, otro candidato a la dirigencia nacional morenista, el manejo de más de 400 millones de pesos y los señalamientos de despilfarro por proselitismos indebidos; la denuncia, ante instancias ministeriales por presuntos malos manejos de partidas de decenas y decenas de millones  de pesos, de una dirigente a la que le concluyeron su mando y que hoy aspira de nueva cuenta a retomar la riendas; los continuos golpes bajos y otras descalificaciones.

Alguien captó el ambiente enrarecido y le preguntó al Presidente su opinión sobre la situación de Morena.

Se trataba del viernes matutino del 2 de octubre (fecha de dolorosa herida en México, lamentablemente, sin pronunciamiento alguno en esa conferencia presidencial; mucho menos una cita sobre el represor Luis Echeverría, en estos supuestos tiempos de justicia, paz y de la voz del pueblo. Nada sobre el genocidio perpetrado contra estudiantes hace 52 años. Las urnas de la democracia del uno de julio del 2018, vueltas a arrinconar dos años después, por la impunidad).

De cara a Morena, López Obrador atajaría: “Yo no opino sobre esto”.

Y pareció que hasta ahí, cinco palabras. 

Pero se picaría: “sí creo que se tienen que poner por delante las causas que se defienden, no los intereses personales por legítimos que sean.”

“Un partido político, cualquiera, si no tiene principios, si no tiene ideales, si no piensa en el pueblo, en luchar por causas justas, no es más que una franquicia, un mecanismo para que ambiciosos vulgares se encaramen en cargos públicos sólo para su provecho, ya sea en lo político porque desean ostentar poder o provecho económico…”

“No, es que yo quiero ser dirigente porque así trasciende en lo personal. Lo importante es pensar en los demás, si no hay amor al prójimo no se es buen dirigente. El individualista, el egoísta, el que le da la espalda al que sufre no es buen dirigente ni es buen político, es un convenenciero, un arribista, un oportunista, un falsario y ya basta de eso, estamos en una etapa nueva.”

 “Afortunadamente, es la gente la que está empujando la transformación. Lo dije hace unos días, lo repito, el motor del cambio es el pueblo. Y que no se confundan los dirigentes, no debemos nosotros confundirnos, es el pueblo el que manda, es el pueblo el que decide y no nos podemos desprender de eso, eso es lo fundamental, no puede haber divorcio entre dirigentes, entre gobernantes y el pueblo, como era antes.”

 “Entonces, no es para Morena, es en general este punto de vista, de que ya al carajo con el oportunismo, con la antigua forma de hacer política de que ‘me voy a colar’ -entre comillas- ‘y no me importa el pueblo’. Ni hablan con la gente, no platican, no recogen los sentimientos del pueblo, porque traen todavía el esquema antiguo, el viejo molde, que hay que terminar de romperlo…”

  “A mí me llama mucho la atención que -lo voy a decir nada más por esta ocasión, dejo la investidura- llevan los dirigentes de Morena, de mi partido -aunque yo tengo licencia porque soy presidente- no sé cuánto tiempo sin resolver lo de la dirigencia, como más de un año y enfrascados en pleitos y todo.”

“Y se hacen las encuestas y se le pregunta a la gente: si fuesen las elecciones ¿por qué partido votarías? y ese partido está hasta arriba; o sea, es mucho pueblo para tan poco dirigente, con todo respeto, porque no hay dirección, hay un desbarajuste; sin embargo, el pueblo tiene otra idea. Ojalá y los dirigentes estén a la altura del pueblo, eso sería mejor…”.

Tiempos rudos.

GRILLAS Y GRILLOS

“La misión que nos hemos planteado es convocar a personas, grupos, cámaras, gremios, asociaciones, integrantes de la sociedad civil y todos los ciudadanos y ciudadanas, estudiantes, profesionistas y jubilados, artistas y empresarios, amas de casa y maestros, jóvenes, adultos mayores, hombres y mujeres, personas con discapacidad, sin ninguna distinción de credo o nivel económico, pues es responsabilidad de todos y todas la construcción de un estado mejor”.

Así se manifestaron ayer los dirigentes estatales partidistas Carlos Rochín (PAN), Gabriela Cisneros (PRI), Noé de la Rosa Escalante (PRD), Pilar Eduardo Carballo Ruiz (PRS) y Jesús Montoya Turrillas (Humanista), al coincidir en pronunciamientos por aliarse con miras a las comicios de junio del 2021, en los que en Baja California Sur estarán en juego la gubernatura, cinco ayuntamientos y 21 diputaciones locales (16 de mayoría relativa y 5 plurinominales).

Reiteraron: “vamos por una gran alianza compuesta por toda la sociedad, pues la tarea pública va más allá de todos los partidos”.

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