Donald Trump entre aplausos y abucheos en final del Mundial de Clubes en EE.UU.

Foto: KEVIN LAMARQUE / POOL / AFP
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, experimentó la agonía y el éxtasis este domingo durante la final del Mundial de Clubes, en la que el Chelsea venció 3-0 al Paris Saint-Germain (PSG).
Como invitado de honor, Trump celebró con saltos y aplausos la victoria de los jugadores del Chelsea, especialmente cuando su capitán, Reece James, levantó el trofeo que el mandatario entregó tras el partido en el estadio MetLife, en East Rutherford, cerca de Nueva York.
Silbidos y aplausos en la ceremonia de premiación
Antes de la entrega, Trump fue abucheado ruidosamente en medio de aplausos mientras caminaba hacia el podio para la ceremonia de premiación, encabezada por el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, frente a unos 81,000 espectadores.
Aunque inicialmente fue aplaudido al llegar al estadio junto con la primera dama, Melania Trump, su aparición en la pantalla gigante durante el himno nacional de Estados Unidos fue recibida con silbidos, y la transmisión cortó rápidamente la imagen.
Los abucheos continuaron cuando posaba para fotos junto a los árbitros, pero no afectaron su ánimo al entregar el Balón de Oro al mejor jugador, el británico Cole Palmer, del Chelsea, y al otorgar medallas al PSG.
Alianza Trump-Infantino para el Mundial 2026
Trump expresó que aprovechará el Mundial de Clubes y la próxima Copa del Mundo 2026, organizada por Estados Unidos, Canadá y México, como símbolos de una “Era de Oro” para el país durante un posible segundo mandato.
La final del Mundial de 2026 se jugará en el mismo estadio MetLife, el 19 de julio, en el marco del 250 aniversario de la Independencia estadounidense.
Para asegurar el éxito del torneo, Trump creó un grupo de trabajo en la Casa Blanca encargado de la logística del evento.
El respaldo de la FIFA y el gusto familiar por el fútbol
Trump ha cultivado una cercana relación con Infantino, quien ha visitado frecuentemente la Casa Blanca y mantuvo el trofeo del Mundial de Clubes en el Despacho Oval desde marzo.
Infantino destacó el apoyo del mandatario al Mundial de Clubes y al Mundial 2026, y compartió que el hijo de Trump, Barron, de 19 años, es un gran fanático del fútbol, lo que ha acercado más al presidente al deporte.
Desafíos por las políticas migratorias y el crecimiento del fútbol en EE. UU.
A pesar del entusiasmo, las políticas antiinmigración de Trump han generado preocupación sobre si afectarán la llegada de aficionados internacionales al Mundial 2026.
Bajo el liderazgo de Infantino, la FIFA trabaja para que Estados Unidos se enamore cada vez más del fútbol, el deporte más popular del planeta, y que el evento sea todo un éxito.
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