28 perros fueron abandonados en la carretera por CEMAC

Ésta es la historia de 28 perritos que fueron sacados de su hogar con engaños de un rancho en la comunidad Las Pocitas al norte de La Paz el 11 de marzo, a Jacinto Álvarez, su dueño le dijeron que serían llevados al CEMAC para darles una mejor vida.

Es la historia más indignante de maltrato animal que se ha registrado en Baja California Sur, y no fue cometida por dueños irresponsables, lamentablemente fueron presuntos servidores públicos de Prevención del Delito y del Centro Municipal de Atención Canina (CEMAC).

Había perros de distintos tamaños y todos fueron mezclados sin distingo alguno, todos hacinados en la misma jaula de la patrulla canina, dicen los testigos que “como si fueran al matadero”, así lo dijo Claudia Martínez, testigo y participante en el rescate.

Nunca hay que mezclar a tantos perros, metieron 28 perros adentro de una patrulla de diferente tamaño. Así como si fueran al matadero, así orale súbase (…) Dice que empezó, que lo obligó a recoger a los perros, y empezaba a aventar otros perros chiquitos, y metieron 28 perros en una patrulla.

Un grupo de hombres y mujeres, locales y extranjeros, se reunieron para denunciar el incidente ante las cámaras de CPS Noticias.

Dijeron que fueron cuatro hombres de civil, al parecer del Centro Canino, y un Policía Municipal, sin oponer resistencia y en busca de una mejor vida para algunos de sus perros, el ranchero accedió, pero cuál fue su sorpresa que se querían llevar a todos, así lo comentó Claudia.

En una patrulla canina, la patrulla canina, entonces que se baja el policía que dice vengo por los perros, y le dice el señor bueno dice si eres policía y vio hacia el Señor, dice te separo unas cuatro o cinco las hembritas grandes, y empezó a separar los perros, que el policía dice no, todos, dame todos, dice porque si no entro a tu casa.

Los 28 perritos fueron sacados del poblado, lo más cruel de la historia fue que los abandonaron a su suerte en el kilómetro 61 de la carretera La Paz a Ciudad Constitución, supuestamente el personal del CEMAC dijeron que uno de los perros empezó a pelear y optaron por dejarlos sobre la carretera, así lo dijo la testigo.

Ustedes están para proteger, no para maltratar y incluso la Ley de Justicia Penal dice que no se debe de utilizar la fuerza innecesaria, y no nada más con nosotros los humanos, también con los animales, porque también sienten y son parte de nuestro entorno, entonces resulta que bueno se les abrió la puerta, los soltaron, no sé qué pasó ahí, el chiste está que los perros duraron 7 días ahí.

El 20 de marzo, 9 días después del abandono, Jacinto y un grupo de ciudadanos pudieron dar con el lugar donde se encontraban abandonados. El lugar del hallazgo carece de árboles, agua y comida o algún poblado cercano, los dejaron a su suerte.

La hermana del señor me está diciendo es que pasaban los habitantes de Las Pocitas le decían: mira salieron tus perros ahí, el señor decía: no es que no son mis perros, están en CEMAC, estás confundido, allá están mis perritos y les voy a llevar el sábado croquetas; hasta que un primo del señor le tomó una foto a un perro, y dice mira, no dice, pos sí era mi Regina (sic) el que se atropelló, el perrito grande era Juan Antonio.

Gracias al aviso de quienes circulaban por la Transpeninsular, Claudia Martínez, su hijo y la familia de Jacinto, pudieron rescatar a unos cuantos, aunque muchos estaban con serios cuadros de deshidratación y desnutrición, consideran que algunos no logren sobrevivir.

Lo que hizo mi hijo fue gritar señor encontré esos perros y ya vino el señor corriendo y el señor llorando, o sea fue impresionante ver un ranchero, de esos duros, que que están todo el día en el monte trabajando, llorar (…) Se metieron ellos y ya entre el Señor y me dijo cargando un perro otro perro impresionante ver a dos o tres perritos temblando.

A mitad del rescate, durante el primer traslado, 5 de los perros más graves tuvieron que esperar en el lugar a que regresaran por ellos, dos murieron en la espera de regresar a casa. Al ver esto, Jacinto dio un grito desgarrador.

Se metieron al monte a llorar, fue tan impresionante, yo en ese momento me puse a llorar, porque aullaban (…) el señor llegó corriendo hacia donde estábamos nosotros, y llorando el señor, gritando, o sea, feo y me dice es que estos desgraciados nunca se los voy a perdonar.

Pudieron rescatar a 15 con vida, lamentablemente otros 5 murieron de deshidratación y 8 están desaparecidos. Hasta hace unos días, como puedo Jacinto se va al kilómetro 61, con una cobija, agua y croquetas en espera de lograr el rescate de los otros 8 que siguen perdidos.

Ya le dije qué va a ser señor, me dice pues hay ocho perros perdidos ahí adentro (…) Me dijo bueno ustedes váyanse, yo me quedo aquí, le dije oiga señor, pues nada más trae una cobija, no trae nada, sí, dice, pero aunque me muera aquí va a ser con mis perros.

El indignante caso de los perritos abandonados de Las Pocitas ha conmovido a muchas personas dedicadas al rescate de animales, en su mayoría mujeres, quienes van a seguir de cerca el caso hasta que se haga justicia y que no se repita el caso de maltrato en La Paz.

Esta es la primera parte de la historia del cruel abandono de los perritos del kilómetro 61, si alguien los ha visto, informen de inmediato a Jacinto Álvarez Geraldo, ya que desesperadamente sigue recorriendo la zona.