Aseguran material de pornografía infantil en operativo en Los Cabos
La Fiscalía General de la República (FGR) y autoridades estatales en Baja California Sur llevaron a cabo una orden de cateo en un domicilio en el municipio de Los Cabos, tras recibir un reporte sobre material de aparente pornografía infantil. Las autoridades informaron que se realizarán investigaciones para garantizar justicia y seguridad a posibles víctimas.
De acuerdo con la FGR, la investigación comenzó a raíz de una denuncia realizada por un elemento de la Guardia Nacional, quien reportó la existencia de material sensible relacionado con actos sexuales que involucraban a personas menores de edad en un domicilio de la colonia Jardines del Sol, en la delegación de Cabo San Lucas.
Ante esta denuncia, el Ministerio Público Federal abrió una carpeta de investigación y obtuvo de un juez federal una orden de cateo. Este operativo se ejecutó en colaboración con la Policía Estatal Cibernética, la Unidad de Investigación y Análisis, y agentes de la Secretaría de Marina Armada de México.
Durante el cateo, las autoridades aseguraron tres teléfonos celulares, dos computadoras, cuatro discos compactos, un módem y equipo de grabación. Estos indicios fueron preservados y se procederá a extraer la información necesaria para esclarecer los hechos.
De acuerdo con el artículo 13 de la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas de estos Delitos, quienes se beneficien de la explotación de personas a través de la prostitución, pornografía, exhibiciones, turismo sexual u otras actividades sexuales remuneradas pueden enfrentar penas de entre 15 y 30 años de prisión.
Este año, colectivos feministas en Baja California Sur han denunciado una presunta red de pedofilia en Los Cabos. Las investigaciones comenzaron tras publicaciones en redes sociales hechas por usuarios presuntamente falsos, quienes solicitaban “modelos de ropa interior” menores de edad.
Según la información difundida, también se alertó sobre personas que, haciéndose pasar por “sobadores”, “fotógrafos” o “ginecólogos”, ofrecían trabajos o servicios mediante grupos locales en redes sociales, solicitando fotografías de mujeres y niñas.
YJ