Así se vio desde el espacio el ataque del 11-S a las Torres Gemelas
No sabía qué era lo que estaba pasando exactamente, pero sabía que era algo muy malo”, así recuerda el astronauta Frank Culbertson sobre la vista que tenía desde el espacio hacia Nueva York, durante el ataque terrorista a las Torres Gemelas. Culbertson explica que al ver la gran nube de humo sobre la zona de Manhattan dijo que sintió un gran dolor porque parecía que veía una “herida” en su país.
El 11 de septiembre de 2001 Culbertson era el comandante de la Estación Espacial Internacional. En el diario que llevó durante su expedición espacial, plasmó sus reflexiones sobre aquel día.
En aquellas páginas el astronauta explicó que casi no había escrito en el mes que llevaba ahí porque casi no tenía tiempo y porque no se sentía cómodo anotando en su bitácora cosas que hablaría con su familia y amigos, sin embargo, aquel día hizo una excepción, pues “obviamente el mundo cambió hoy”, escribió.
“Lo que hago y digo es mucho menor comparado a lo que sucedió hoy en nuestro país cuando fue atacada por… ¿quiénes? Terroristas, es todo lo que sé, supongo. Es difícil saber a quién hay que dirigir todo este coraje y miedo”, se lee en su bitácora del 12 de septiembre de 2001.
Culberston narra en su bitácora que ese día recién habían terminado de hacer sus tareas de la mañana, entre las cuáles estaban los exámenes físicos de todos los tripulantes, una de las que más consume tiempo detalló. Después, en una conversación privada, el médico abordo dijo que “allá abajo estaban teniendo un mal día. No tenía ni idea…”, recuerda.
El astronauta cuenta que cuando le explicó el médico lo que había sucedido estaba “horrorizado”.
“Mi primer pensamiento fue que esa ni siquiera era una conversación real, que seguía escuchando uno de mis cassettes de Tom Clancy (escritor).
“Vi el mapa mundial en la computadora para saber sobre qué parte del mundo estábamos y me di cuenta que estábamos en el sudeste de Canadá y que dentro de poco pasaríamos sobre Nueva Inglaterra. Me moví dentro de la estación hasta que encontré una ventana que me daría una vista sobre NY y tomé la cámara que tenía a la mano. Resultó ser una cámara de video”, se lee en el diario.
Culberston explica que tras leer un artículo noticioso que recién había recibido, entendió que la gran nube que veían salir de Manhattan se había generado con el colapso de la segunda torre del World Trade Center. También comenta que trataron de ver si en Washington había alguna señal del atentado, pero no vieron más que una bruma.
“Fue muy difícil pensar en el trabajo luego de ver eso (…) Más allá del impacto emocional de ver a tu país siendo atacado y que cientos de sus ciudadanos e incluso algunos amigos habían sido asesinados, el sentimiento más abrumador desde donde estaba fue el de la soledad”, concluyó el astronauta.