Ballena gris: un tesoro natural en las costas de Baja California Sur
La ballena gris (Eschrichtius robustus) es una especie emblemática que visita las costas de Baja California Sur entre los meses de diciembre y abril. Cada año, este cetáceo realiza una de las migraciones más largas del reino animal, recorriendo aproximadamente 20,000 kilómetros desde el mar de Bering, en Alaska, hasta las cálidas aguas del Pacífico Mexicano.
En México, las lagunas costeras de Baja California Sur, como Ojo de Liebre y San Ignacio, en Mulegé, se han convertido en refugios cruciales para esta especie.
Durante la temporada de avistamiento, estas lagunas reciben un promedio anual de 1,100 ballenas en Ojo de Liebre y alrededor de 450 en la laguna de San Ignacio, según datos proporcionados por Data Mares.
Estas áreas resultan fundamentales para la reproducción de las ballenas y representan un espectáculo natural que atrae al turismo internacional.
🌎 Ballena gris, Eschrichtius robustus.
Cada año viaja aproximadamente 20,000 km desde Alaska hasta las lagunas costeras en Baja California Sur en donde nacen los ballenatos.
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— dataMares (@dataMares) January 14, 2025
La ballena gris se distingue por su coloración gris con manchas blancas y su característica joroba con nódulos en lugar de una aleta dorsal. Un adulto puede medir entre 13 y 15 metros de largo y pesar hasta 33 toneladas.
Además, su soplo en forma de “V” y sus exhibiciones en la superficie, como saltos y “espiadas”, son espectáculos únicos que atraen a miles de visitantes.
Gracias a décadas de esfuerzos de conservación, como la inclusión de la especie en la NOM-059-ECOL-1994 y la creación de áreas protegidas como la Reserva de la Biosfera El Vizcaíno, la población de ballena gris ha mostrado una notable recuperación tras haber estado al borde de la extinción debido a la cacería intensiva en los siglos XIX y XX. Actualmente, se encuentra clasificada como una especie de “preocupación menor” (LC, por sus siglas en inglés) por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
La observación de ballenas en Baja California Sur genera importantes beneficios económicos para la región. De acuerdo con Data Mares, el avistamiento de esta especie deja una derrama económica de seis millones de dólares anuales.
Además de las lagunas Ojo de Liebre y San Ignacio, otros sitios de Baja California Sur en donde se puede observar a la ballena gris son Puerto Adolfo López Mateos y Puerto San Carlos, en Comondú, y Puerto Chale, en La Paz.
jb