BORREGOS
Duda Sustentable
Nos están matando. A los mexicanos nos está llegando la muerte anticipadamente. Salimos a la calle en busca de la vida y estamos encontrando la muerte. Miles y miles de muertes evitables. Muertes que no debieran suceder.
Muertes prematuras por coronavirus o por violencia. Gobiernos que experimentan con nosotros, como conejillos de indias, porque nos lanzan al campo de batalla como carne de cañón; para tomarle el pulso y la temperatura a la pandemia o a la inseguridad y decidir las siguientes ocurrencias que ellos llaman estrategias. Negligencia gubernamental notoria por evidente.
Más de mil muertos por Coronavirus o 117 homicidios dolosos en un mismo día; sí, en un mismo día, son una barbaridad de mexicanos muertos y de familias afectadas. Peor que una guerra.
¿Hasta cuántos indicadores derrumbados soporta el honor de un mandatario?
¿Hasta qué número de desempleados y de pobres aguanta el pudor de un político?
¿Hasta qué número de muertos por día o por mes aguanta la vergüenza de un gobernante?
Con tantas alarmas encendidas y tantos focos rojos, vemos al Gabinete, a la CONAGO y a los Congresos, pasmados ante la crisis. Entumidos ante las adversidades. Como borregos, nos esquilman cada que necesitan. Nos arrean y nos encorralan en donde les conviene; y nos vuelven a trasquilar y a quitarnos más lana. Al final, ya que no les servimos, nos mandan al matadero; borrego que no da lana, al rastro.
Ni nos ven, ni nos oyen. Una vez que les damos nuestro voto, nos volvemos invisibles y ellos se vuelven ciegos y sordos.
Siempre están en contienda electoral porque vivir fuera del presupuesto es vivir en el error.
Al compararnos con otros países, incluidos los de América Latina, se nos cae la cara de vergüenza.
¿Será que los gobernantes no se dan cuenta?
Esa es una duda sustentable.