El cáncer de mama es una lucha, pero con el IMSS, en Baja California Sur
Octubre es el mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, siendo la principal causa de mortalidad en mujeres en el mundo; y el que más se registra en Baja California Sur.
Mujer con cáncer de mama, casi terminal, denuncia negligencia médica en IMSS La Paz
Una de las instituciones de salud pública que está designado para prevenir, diagnosticar y tratar el cáncer de mama en Baja California Sur es el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). En numerosas ocasiones lanzan campañas preventivas, aseguran contar con servicios médicos eficientes y especializados, con los medicamentos adecuados; en fin, con todo lo que implica atender esta enfermedad mortal, progresiva, en la que actuar a tiempo es clave para sobrevivir.
¿Realmente es verdad lo que se dice y asegura ser el IMSS para el tratamiento del cáncer de mama? ¿Cómo es vivir el cáncer de mama desde el diagnóstico en esta institución de salud pública? Existen casos donde no se tiene la atención oportuna, y CPS Noticias BCS y Tribuna de México tuvo la oportunidad de estar de cerca con María Luisa Gastélum, una paciente de 56 años con cáncer de mama desde hace casi 6 años:
“-Venga, le voy a hacer un ultrasonido; el seno y todo-, me dijo, y la radióloga me dijo: -¿Sabes qué? Tienes cáncer-… Estaba sola, sola fui. Y le dije: ¿qué voy a hacer?”, relató.
María Luisa llegó a la oficina de la mano de su esposo Miguel, sonriendo, con su camisa amarilla, su cabello corto bien peinado, maquillaje impecable. Su calidez se transmitía, y justo así se sintió el platicar con ella.
Ella no es solamente una “mujer enferma”; María Luisa es una señora que puede y ha podido con todo, que ama andar en bicicleta, estar activa, tejer, cocinar. Es una mujer decidida y resiliente, que le tira “trancazos” al cáncer. Sus cambios físicos los afronta poco a poco, señalaba; pero su familia es su mayor sostén en la vida. Lo ha sido desde el diagnóstico, y lo será para siempre, contó:
“Entonces ya, me vine yo y nos fuimos a mi casa, muy triste, pero pues gracias a Dios ellos, mi familia, siempre todos me han apoyado. Todos “hay que echarle ganas”. Y pues yo soy una persona que siempre le he echado ganas, que veo las cosas y trato de verle lo positivo… Y no te voy a decir que en la noche no a veces pienso, lloro, me estreso, no sé; pero, pues trato de darles buena cara, pues de que ellos vean que yo estoy bien, que a pesar de mi enfermedad estoy bien. Porque, qué caso tiene, si la enfermedad no se te va a curar con llorar… No sé, es un pensamiento que yo tengo, ser positiva en eso”, detalló.
A María Luisa le extirparon su seno izquierdo, y actualmente presenta metástasis en el derecho, pues uno de los oncólogos, antes de jubilarse, no la atendió. Es decir, el cáncer pudo haberse acabado por completo tras la primera operación, pero por no recibir la atención, su condición de salud empeoró.
El cáncer es un reloj de tiempo, pero parece que a la mayoría de los trabajadores del IMSS, especialmente directivos, no les importa; relataba. Como si ellos estuvieran exentos de padecer esta mortal enfermedad, expresó.
Pero, ahora, principalmente ante todo, ¿cuál fue el parteaguas de la historia de María Luisa? Que en el área de Medicina Preventiva, no la trataron a tiempo. Se negaron a orientarla en su revisión mamaria. Y después, uno de los oncólogos rechazó la realización de unos estudios, cruciales para controlar e incluso recuperarse por completo:
“La bola me creció y se me inflamó, pero bien feo. Entonces voy al seguro, para que me hagan una mastografía y me realicen un estudio, no sé; yo ahí tenía 53, 53 años. Entonces, fui a medicina preventiva, que es donde va uno. Bueno, pues para no hacerla tan largo; entré a medicina preventiva, la muchacha que estaba ahí en ningún momento me quiso… Te miran como apestada… “No te voy a hacer yo el estudio, usted se tiene que tocar”… Sola no es lo mismo; porque ellos saben, ellos estudian, ella es tan… Era un problema táctil y visible que tenía en el seno. En ningún momento me quiso hacer el estudio. Ella me dijo “le voy a hacer la orden, pero va a ir a una lista de 70 y tantas personas”, era la última, ¿cuándo me iba a tocar? Pues no sabía, yo ya tenía un problema”, contó.
Y así, fue como el cáncer la atacó. En estos días, la señora María Luisa nos seguirá contando sus vivencias con cáncer de mama, y su lucha por intentar ser atendida en el IMSS, en la capital del estado. Reconociendo que la batalla no es solamente con el cáncer, también está luchando por ser atendida en tiempo y forma.
LM