Condenan a dos tiktokers en Egipto por trata de personas
El tribunal egipcio ha condenado a dos mujeres influencers de TikTok a 6 y 10 años de cárcel respectivamente, por “trata de personas”, dijo este lunes, uno de los abogados que las representa a la AFP.
El fallo contra Haneen Hossam y Mowada al Adham, “las Tiktokers egipcias”, fue dictado a última hora del domingo por el Tribunal Penal de El Cairo.
Adham, fue sentenciada a seis años, dijo su abogado Saber Sokkar, mientras que Hossam recibió una sentencia de 10 años, ambas acusadas de “trata de personas”.
Otros cargos incluyen “corromper los valores familiares, incitar al libertinaje y alentar a las mujeres jóvenes a practicar relaciones sexuales”, dijo Sokkar.
Adham estuvo presente en la corte para el fallo, sin embargo Hossam, fue sentenciada en ausencia, debido a que se encuentra huyendo, dijo el abogado. Además explicó que Hossam recibió una sentencia más alta, porque no había comparecido ante el tribunal en audiencias anteriores. Agregó que las mujeres pueden apelar.
Fueron arrestadas el año pasado y condenadas a dos años de cárcel cada una, por “atacar los valores de la sociedad”, en videos publicados en TikTok.
En un video, Hossam le dijo a sus 1,3 millones de suscriptores que las niñas podían trabajar para ella por dinero, por lo que también fue acusada el año pasado de “libertinaje” y “trata de personas”. Pero en enero un tribunal de apelaciones, absolvió a la pareja.
El ataque contra mujeres influyentes ha reavivado un acalorado debate en el país musulmán profundamente conservador, sobre lo que constituyen las libertades individuales y los valores sociales.
Sin embargo, la represión no es inusual en Egipto, donde varias bailarinas del vientre y cantantes pop, han sido blanco en los últimos años por contenido en línea considerado demasiado sugerente.
Diversos grupos de derechos humanos, dicen que se han restringido más libertades en Egipto, bajo el presidente, Abdel Fattah al-Sisi, quien asumió el cargo en 2014.
En los últimos años, Egipto ha aplicado estrictos controles de Internet a través de leyes, que permiten a las autoridades bloquear sitios web vistos como una amenaza para la seguridad nacional y monitorear cuentas personales en redes sociales, con más de 5.000 seguidores.