Condiciones salariales y laborales de las mujeres empeoraron con la pandemia

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) dio a conocer, que Baja California Sur fue uno de los cuatro estados donde las mujeres resultaron seriamente afectadas en temas económicos, al inicio de la pandemia debido a la pérdida de empleos formales e informales.  

En los últimos dos años, la inequidad laboral entre hombres y mujeres se profundizó con cargas de trabajo más pesadas, más horas y menos remuneradas para el sexo femenino.

Al inicio de la epidemia de coronavirus, el sector de servicios fue el que más actividades suspendió, esta área tenía mayor participación laboral de las mujeres; destaca que hasta el momento, la reapertura de estos empleos se ha dado muy lentamente.   

Prueba de ello es que en abril, mayo y junio del 2020 había más de 20 mil 165 mujeres trabajando, mientras que al cierre del 2021 apenas superaba la cantidad de 23 mil.

El primer año de la pandemia, el INEGI registró 2.7 millones de mujeres inactivas económicamente, es decir que no tenían ingresos económicos por falta de empleo remunerado, de las cuales más del 88 por ciento estaba laborando antes de que estallara el problema de salud. 

Han sido los trabajos informales, los que más se han recuperado hasta el momento, pues a inicios del 2020 la tasa de informalidad entre las mujeres era del 56.7%, luego bajó al 49.6% y para finales del 2021 subió al 56.2%, casi llegando a los índices previos al Covid-19.

Resalta que antes de la pandemia había más mujeres trabajando en la informalidad en comparación a los hombres, y los empleos para estos últimos empezaron a recuperarse mucho antes.

Otros datos, indicaron que en abril del 2020, 5 de cada 10 mujeres que aún trabajaban, recibieron menores ingresos, además de que este sector percibía un promedio de 2,500 pesos menos que lo que ganaban los hombres antes de la pandemia. 

Hace dos años, las mujeres aportaron 2.7 veces más valor económico que los hombres por su trabajo no remunerado en los hogares, en 2019 el porcentaje de mujeres que se dedicaban a las labores del hogar era del 16.8, un año después aumentó al 20.0 por ciento.

El panorama económico y laboral de los últimos dos años se traduce en el retroceso en temas de equidad salarial entre mujeres y hombres, desencadenado por la pandemia de salud.