Continúa el hostigamiento a orcas; ahora en la Bahía de La Paz
El hostigamiento a orcas es una problemática que cada vez se da de manera más frecuente en el Golfo de California. A la redacción de CPS Noticias llegaron una serie de videos en los que se observa esta práctica; ahora en la Bahía de La Paz, cerca de Pichilingue.
En las imágenes se percibe cómo al menos dos embarcaciones turísticas persiguen a las orcas. Los tripulantes emiten gritos de asombro y hacen chistes acerca de que los animales puedan golpear la lancha.
Respecto a las consecuencias de este tipo de actividades, el profesor Jorge Urbán Ramírez, responsable del programa de Investigación de Mamíferos Marinos de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), indicó que en el futuro podría registrarse un menor número de orcas en mares sudcalifornianos.
“En otras situaciones, con otro tipo de cetáceos, lo que se observa a mediano plazo es que la especie que se acosa, deja de visitar esas zonas, no las evita; o sea, no le interesa ir a un lugar donde es acosada. Cuando no existe esa posibilidad de que el animal se vaya para otro lado, entonces ya podrían verse a largo plazo algunas afectaciones en disminución del número de crías”, dijo
El especialista expuso que la distribución de las orcas a lo largo del Golfo de California es variable, y cambia dependiendo de la disponibilidad de alimento. En este sentido, dijo que no se puede conocer con precisión los puntos en los que se congregarán, por lo que algunos prestadores de servicios turísticos suelen hacer uso de la tecnología para detectar las manadas y perseguirlas.
“Usan ultraligeros o avionetas para buscar a las orcas, avisar a los que están en tierra por dónde están y entonces ya se dirigen ahí. El problema es que estas empresas, que lo pueden hacer bien o mal, eso no quita que esté prohibido, son la guía para otras embarcaciones que están esperando para ver hacia dónde se dirigen y ahí van todos”, explicó.
Por último, comentó que es urgente que las autoridades regulen estas actividades. Hizo hincapié en que, pese a estar prohibidas, es una realidad que las empresas las realizan, por lo que se deben establecer lineamientos para evitar accidentes que afecten tanto a las orcas como a los humanos.