Crear comunidad ayuda a mantener la motivación en el gimnasio
Como cada inicio de año nuevo, muchas personas se proponen modificar hábitos alimenticios y mejorar sus estilos de vida con ejercicios que brinda cualquier gimnasio. Sin embargo, la mayoría tira la toalla apenas comienzan y pocos son los perseverantes que respetan el proceso que implica una transformación física. Fernando Marron Verduzco, propietario de un gimnasio, relató su opinión, argumentando que debe existir un vínculo con el socio para que este se sienta cómodo y decida permanecer.
“Se tiene que tener una mentalidad completamente distinta, ya que las personas que van al gimnasio, lo hacen por qué quieren salir de su rutina diaria y quieren liberarse de sus trabajos con un ambiente diferente; en cambio, si un socio llega al gimnasio y el instructor lo recibe con la mejor actitud: “hey que onda, ¿cómo estás? Bienvenido, adelante, pásale (…) Con un trato así, se crea una conexión, una amistad y se crea un vínculo, lo que hace que el socio no desista, porque cuando vayan al gimnasio, no lo verán como un ejercicio tedioso, sino que vendrán, platicarán, conocerán y tendrán buenas experiencias. Aparte de ello, lograrán sus objetivos con ejercicio”.
Marron Verduzco, subrayó la importancia de la armonía al buscar crear una comunidad donde los miembros se apoyen y respeten mutuamente. Destacó la necesidad de que la convivencia sea agradable, en contraste con la hostilidad que a menudo se encuentra en otros gimnasios, donde el personal puede ser irrespetuoso y descuidado con los usuarios.
La idea es cultivar una convivencia agradable en lugar de un entorno hostil, lo cual ha demostrado ser un factor decisivo para retener a los miembros.
LLG