Científicos documentan degradación de arrecifes rocosos en el Golfo de California
En septiembre, 18 especialistas se embarcaron en una expedición de un mes para monitorear el estado de los arrecifes rocosos del Golfo de California. Este es un trabajo que han venido realizando desde hace 25 años, a través de los cuales han podido documentar el deterioro de los ecosistemas marinos.
Esta ocasión, lo que observaron fue poco alentador. La coordinadora de Monitoreo Ecológico en el Centro para la Biodiversidad Marina y la Conservación (CBMC), Magali Ramírez Zúñiga, indicó que continúan analizando los datos obtenidos. Sin embargo, a simple vista, los arrecifes se encuentran seriamente deteriorados.
“Nos encontramos con un panorama en el que los abanicos de coral que son tan importantes están rotos. O sea, literalmente parece que les dieron balazos a los abanicos, tienen huecos gigantes, están cubiertos de algas. La cuestión del blanqueamiento de los corales duros también es superevidente”, expresó.
La experta enfatizó que este deterioro se ve de manera general a lo largo de todo el golfo. Son pocos los sitios donde la degradación es menor. Estos espacios son las islas San Pedro Mártir, San Marcos y Tortuga, las cuales son conocidas como refugios climáticos por sus condiciones oceanográficas.
Otra de las cosas que sorprendió a los investigadores fue la temperatura del mar, la cual es mayor a la que habían registrado en el pasado. A esto se suma la presencia de basura en puntos donde antes no había.
“Es increíble que estás en una isla en medio de ningún lugar y sigue habiendo basura. Sacas basura de papitas o una botella de PET o las líneas de pesca. A veces nosotros pasamos por ahí y decimos ‘Bueno, me lo voy a llevar’, pero esta vez llegó un punto en el que yo ya no tenía donde más guardar líneas. Entonces sí hay un impacto muy fuerte del ser humano hacia los arrecifes”, manifestó.
Por último, indicó que es urgente que tanto las autoridades como la población en general tome acciones para detener el daño a los arrecifes. Recalcó que aún se puede actuar, pero que el tiempo se agota.
EU