Los Dodgers de Los Ángeles derrotaron 4-2 a los Yankees de Nueva York en el tercer juego de la Serie Mundial, tomando una sólida ventaja de 3-0 en la serie y colocándose a una sola victoria del campeonato.

En un partido reñido disputado en el Yankee Stadium, el equipo angelino impuso su dominio desde el montículo y respondió con bateo oportuno, mientras los Yankees lucharon pero sin lograr revertir la tendencia.

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El partido estuvo marcado por una actuación crucial del bullpen de los Dodgers, con Anthony Banda y Ryan Brasier silenciando la ofensiva de Nueva York en momentos clave.

Shohei Ohtani fue golpeado en un turno al bate, pero pudo mantenerse en el juego hasta generar una de las jugadas más emocionantes: un doble play que enfrió un intento de remontada de los Yankees.

Alex Verdugo encendió las esperanzas de los locales al conectar un cuadrangular de dos carreras en la novena entrada, acercando el marcador, pero el intento final quedó corto cuando Gleyber Torres fue retirado con un rodado al campocorto para cerrar el partido.

El duelo del montículo y bateo oportuno

El abridor Walker Buehler controló las primeras entradas para los Dodgers, mientras que Clarke Schmidt tuvo dificultades para frenar la ofensiva californiana, permitiendo un cuadrangular temprano de Freddie Freeman.

A pesar de que el bullpen de los Yankees logró mantener el juego cerrado, los errores defensivos y el bateo oportuno de Los Ángeles inclinaron la balanza a su favor.

Impacto de Ohtani y la ventaja histórica

A lo largo de la historia, todos los equipos que han tomado una ventaja de 3-0 en la Serie Mundial han logrado coronarse campeones, lo que coloca a los Dodgers en una posición privilegiada.

Sin embargo, con dos juegos más por disputarse en Nueva York, los Yankees aún intentarán evitar la barrida y buscarán extender la serie.