Ejidatarios de Sierras La Giganta y Guadalupe, se manifestaron afuera del Palacio de Gobierno

Las instituciones gubernamentales tienen un plan para designar como Áreas Naturales Protegidas (ANP) a la Sierra Giganta y la Sierra Guadalupe. Sin embargo, los ejidatarios están preocupados porque no tienen certeza de que no serán perjudicados. Por lo tanto, los representantes de más de 20 ejidos en riesgo protestaron en las afueras del Palacio de Gobierno.

Más de 1,500 ejidatarios se ven afectados por esta situación. En este contexto, Ramón Zazueta, uno de los presidentes ejidales, expresó la oposición a la declaración de ANP en ambas áreas del estado, por parte de todos los representantes.

“No estamos de acuerdo con la imposición de las áreas naturales protegidas. Rechazamos esto en nuestras tierras, porque no nos da la certeza, la seguridad, tanto ejidal como en nuestra propiedad. No nos han tomado en cuenta, en la toma de decisiones. De igual manera, nos limita a desempeñar las actividades propias desde los ejidos; y no hay presupuesto ahorita para las áreas naturales protegidas, en este año 2023. No creo que vaya a haber para el 2024 […]”.

Aclararon que no están en contra de la conservación ambiental, sino en contra de la imposición de normativas y del control de las tierras bajo los intereses exclusivos de las instituciones gubernamentales estatales y federales, como mencionó un ejidatario.

“Aquí está una muestra más de nuestro sentir, de los muchos ejidatarios del estado de Baja California Sur. Haciendo una manifestación justa, haciendo una manifestación con derecho, porque el gobierno o los gobiernos nos quieren arrebatar, nos quieren quitar nuestra tierra de una manera vergonzosa, sin vergüenza compañeros, con el pretexto de declarar “Área Natural Protegida”. Nosotros no ocupamos que nuestra tierra sea área natural protegida para cuidar y preservar el medio ambiente; nosotros por mucho tiempo hemos cuidado y hemos preservado esta naturaleza, los recursos naturales. El Gobierno viene con estas pretensiones y no lo vamos a permitir”.

En este sentido, esperan recibir una mejor recepción y un diálogo más amplio con las autoridades gubernamentales correspondientes, ya que han detectado diversas inconsistencias por parte de las instituciones, lo que ha generado inquietud entre los ejidatarios.

“Nos debieron a nosotros 10 mil hectáreas […] ¿Cuántos errores más no habrá? En ese sentido, por eso nuestra duda de todo lo que puede pasar con esto”.

Por otro lado, Marely Higuera, presidenta y apoderada del Ejido La Purísima, argumentó que una de las razones detrás de la intención de declarar ANP por parte de las autoridades gubernamentales está relacionada con la conservación del agua. Sin embargo, destacó que se ha otorgado una prioridad superior al sector minero, una actividad que consume este recurso vital de manera significativa.

“Dicen que están preocupados por el agua, eso no es cierto compañeros. El agua la quieren para la actividad minera; porque una de las pocas actividades que permiten las áreas naturales protegidas es la minería. No se dejen engañar; a ellos no les interesa el bienestar de nuestro Estado, el bienestar de nuestro Estado y el de los pobladores les interesa únicamente cuando quieren conseguir votos, no antes. Cuando andan en campañas, se acuerdan de todas las comunidades que están olvidadas y alejadas, que no tienen acceso ni a servicios, ni a electricidad ni a caminos”.

Si se llegara a tomar la decisión de designar estas regiones como ANP, los ejidatarios sostienen que deben recibir a cambio una solución que beneficie a todas las partes involucradas. Si no reciben atención por parte de las autoridades estatales, planean llevar su caso al presidente de la República para lograr ser escuchados a nivel nacional.