El Escorpión 75

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El periodista Ildefonso Ortiz dio a conocer ayer, en el sitio de noticias Breitbart, que el 1º de diciembre pasado un funcionario de Tamaulipas que se hallaba a punto de ser aprehendido por agentes de la fiscalía estatal, escapó en un helicóptero sin números y sin registro, que llegó a recogerlo al Parque Irrigación.

Autoridades locales le confirmaron a esta columna que el día de los hechos, mientras elementos de la fiscalía estatal llegaban a Ciudad Mante con una orden de aprehensión en contra de Carlos Santiago González, nuevo presidente del distrito de riego 002 de Mante, Tamaulipas, un supuesto empleado del Ayuntamiento llamó al 089 para informar que había oído que una serie de bombas iban a estallar en una escuela, un hospital del IMSS y otros dos edificios públicos del municipio.

Como si se tratara de una serie de narcos, en tanto los edificios eran evacuados –y dos pacientes graves morían durante la evacuación–, el helicóptero desconocido se llevó a Santiago González, sobre quien pesan acusaciones por el delito de extorsión.

Se comprobó que quien había llamado al 089 había dado un nombre y un número telefónico falsos. Se investiga si se trató de una coincidencia, o de una operación del Cártel del Golfo, con quien las autoridades relacionan al presidente del distrito de riego.

Ildefonso Ortiz señala en su nota que Carlos Santiago González es yerno de un empresario huachicolero “ligado a la facción Matamoros del Cártel del Golfo”, Jorge Luis Chabrand, quien de acuerdo con el periodista habría inyectado recursos millonarios a Morena durante la reciente contienda electoral.

El asunto ha sido tratado en la Mesa de Seguridad, donde se pidió a la Fiscalía General de la República que investigara el origen y destino del misterioso helicóptero.

Durante los últimos meses, en El Mante han arreciado las denuncias de extorsión realizadas por “Escorpión 75”, un jefe de plaza del Cártel del Golfo enviado desde Matamoros para someter y poner bajo cuerda a ganaderos, cañeros, comerciantes y empresarios agrícolas.

Su nombre es Jonathan Damián Castro Hernández.

“Escorpión 75” extorsiona a los sindicatos, las cooperativas y los funcionarios del riego de la zona, o bien impone al frente de los distritos a personajes asociados con el Cártel del Golfo.

Las uniones de transportistas que recorren la Tam-Bajío, carretera que conecta El Mante con San Luis Potosí y Querétaro, se quejan porque en los últimos meses el Cártel del Golfo ha vuelto a instalar retenes en el camino y exige el pago de cuotas a cada una de las unidades.

Hace unos meses se viralizaron mensajes de WhatsApp cruzados entre “Escorpión 75” y el líder del Cártel del Noreste en El Mante. En estos, el primero aseguraba que “ya andan knmigo tu saves kienes, todos los locales” (refiriéndose a las autoridades), y afirmaba que “la plaza ya está controlándose al 100”.

Según las autoridades, el grupo Escorpión depende de José Alfredo Cárdenas Martínez, “El Contador”, sobrino del fundador del Cártel del Golfo, Osiel Cárdenas Guillén.

“El Contador” ha librado la prisión en dos ocasiones: la última, el 29 de octubre pasado, cuando fue liberado por un juez de control y salió caminando del Cefereso de Durango.

En el rastro de El Mante, los enviados del Cártel del Golfo, según las denuncias de quienes se atreven a hablar, cobran dos pesos por cada kilo de carne vendida. Las autoridades han identificado a Jesús Natividad Padrón Torres, alias “Chumina”, como uno de los operadores de este tipo de extorsión. En la lista de personajes del CDG ligados a “Escorpión 75” se hallan Pedro Zamarrón Picón, alias “Perico”, y una mujer de nombre Cinthia, a la que se identifica como “la voz” del jefe de plaza: es la encargada de llevar los mensajes, y el monto de las cuotas que deben pagar, a las víctimas.

Hace unos meses la policía detuvo a uno de los que extorsionaban en nombre del CDG al interior del rastro. Fue identificado como Martín Ernesto González. Alegó que estaba amenazado por el crimen organizado y que solo se le indicaba el monto que debía extraer a quienes llegaran a vender su ganado.

Ninguna de las víctimas se animó a denunciarlo.

Según autoridades locales, Carlos Santiago González forma parte de este esquema de extorsión a gran escala. Mientras Ciudad Mante se desquiciaba, un helicóptero sin matrícula lo rescató.

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