El jefe de la OMS advierte de una distribución desigual de la vacuna contra la COVID-19
La distribución de una vacuna contra el COVID-19, no su desarrollo, es el desafío clave en la lucha mundial contra esta contagiosa enfermedad, cree el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
“La medida definitiva del éxito no será la rapidez con la que podamos desarrollar las herramientas. Será cómo podemos distribuirlas equitativamente. Ninguno de nosotros puede aceptar un mundo en el que algunas personas estén protegidas mientras otras permanecen expuestas”, declaró el jefe de la OMS durante una conferencia para recaudación de fondos que tiene como objetivo recolectar al menos 8.200 millones de dólares para la investigación de una vacuna y medicamentos para el tratamiento de coronavirus.
Estados Unidos no participa en el evento tras dejar de financiar la organización, según el deseo del presidente Donald Trump.
A su vez, el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, llamó a desarrollar kits de pruebas, vacunas y tratamientos que no sean muy costosos.
“Estas nuevas herramientas nos ayudarán a controlar plenamente la pandemia y deben ser tratadas como bienes públicos mundiales disponibles y asequibles para todos”, dijo.
Científicos de todo el mundo, incluyendo Estados Unidos, China, Rusia y Europa, están trabajando en la elaboración de posibles vacunas contra el virus desde enero. El genoma del virus ya está bien estudiado y han comenzado las pruebas de laboratorio. Sin embargo, el proceso de comercializar la vacuna será muy largo y podría durar más de un año.