Restauranteros del Triunfo luchan por mantener empleos

A pesar de que los gastos son mayores que los ingresos, restauranteros evitan disminuir la plantilla de empleados

La pandemia ha generado diversos cambios al sector restaurantero, mismos que desde los inicios de la emergencia sanitaria han vivido bajo la incertidumbre del comportamiento del semáforo epidemiológico, dado que de este ha dependido las condiciones en que se desempeñan sus actividades. 

Así lo dio a conocer el señor Romeo Rieque, responsable de un restaurante típico ubicado en la carretera de La Paz a San José del Cabo a la altura del triunfo, quien expresó que a pesar de que en un inicio lo más grave era cerrar su negocio, al mantenerse activo y verificar que los ingresos son  menores a los gastos, el problema se vuelve aún más grave.

“A lo largo de todo este tiempo, hemos visto con mucha tristeza que lo que habíamos avanzado en todo este tiempo hoy lo vemos ya muy mermado, hemos tenido pues una baja muy importante, hablando aproximadamente de un 50% en el mejor de los casos de pérdidas en temas de ingresos, sin embargo aquí estamos nosotros esforzándonos por más mantener esas pequeñas fuentes de empleo, que de alguna manera representan en estos lugares un aliciente para las familias que aquí laboran”.

Informó que para los restaurantes de zonas rurales los gastos aumentan, sobre todo ante la falta de redes de agua potable cada semana se deben rentar pipas, lo cual es un gasto más para su negocio y se vuelve insostenible ante la situación económica generada por la restricción de las actividades.

Aún con este panorama, el señor Romeo mencionó que  cada mañana abren su restaurante en atención al compromiso social que adquirieron con sus empleados, por lo que expresó que la intención es aguantar lo más posible para no tener la necesidad de disminuir la plantilla de trabajadores, así tengan que sacrificar sus  ganancias.

Así mismo mencionó que el compromiso también lo tienen con la población al dar cumplimiento a todas las medidas de protección sanitaria con el fin de asegurar la salud de sus empleados así como de los comensales.

“Tratamos de hacerlo lo más apegado posible a la normatividad, en el entendido de que ese tipo de protocolos tienen un costo para nosotros, tenemos que invertir en esa parte, pero nuestro compromiso va más allá del tema del negocio vamos allá queremos cumplir con la ciudadanía para que ellos se sienten a gusto de venir a visitarnos y nos tengan como una opción segura para los comensales”.

Las limitaciones de aforo, las medidas de distanciamiento social, la reducción de horarios de apertura, la desinfección del local, son algunos de los cambios que ha tenido que realizar el sector restaurantero, los cuales se han sumado a los gastos fijos del sector, es decir una inversión extra para continuar con sus actividades y poder seguir siendo el sostén económico de familias sudcalifornianas.

Foto: Ivette Pérez