¡Cuidado! Tras enorme zanja, automovilistas “maniobran” para evitar accidentes en La Paz
Desde hace más de tres meses, los residentes de la calle Reforma, entre Melitón Albáñez y México, en la colonia Guerrero, han estado lidiando con las consecuencias de una extensa zanja. Esta zanja fue generada debido a la reparación de tuberías de drenaje que llevaban más de un año obstruidas. La situación causaba serios problemas de salud debido a la presencia constante de aguas residuales en la zona, según cuentan los vecinos.
Después de un montón de quejas al Organismo Operador Municipal del Sistema de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de La Paz (OOMSAPAS), finalmente, en julio de este año, acudieron a realizar las labores de obra. Sin embargo, no terminaron todo y dejaron la calle hecha un desastre.
Ahora, la zona está llena de piedras, pedazos de tuberías y escombros de cuando levantaron la calle. Esto ha sido un verdadero dolor de cabeza para la gente que intenta transitar por ahí. Y como si eso no fuera suficiente, hay muy poca iluminación, lo que hace que sea aún más peligroso. Los vecinos están tratando de hacer que las autoridades se den cuenta.
“Esperamos que quienes tienen a cargo las calles sean un poco más conscientes. Cuando abran una calle, deben asegurarse de cerrarla adecuadamente desde el principio. No les llevará mucho tiempo colocar el pavimento adecuado. De lo contrario, les costará más trabajo en el futuro”, comentó un residente.
Los conductores hacen malabares para evitar accidentes o daños a sus autos, pero no son los únicos. Los ciclistas, en la medida de lo posible, se suben a las aceras para evitar los baches. Un residente mencionó que sus bicicletas se están dañando debido a los huecos y baches, por lo que esperaran que arreglaran el problema pronto.
“Los baches y los huecos están dañando los rines de las bicicletas. Sería bueno que los arreglaran, especialmente después de las lluvias que los dejaron en mal estado”, destacó.
Los peatones están alerta para evitar rocas, huecos o montones de tierra que puedan hacer tropezar o caer a alguien.
“Repararon solo una mitad y dejaron la otra sin arreglar. Esto no es un trabajo bien hecho que perdure. Suponemos que las reparaciones deben durar mucho tiempo, en lugar de que cada año estén destapando, tapando y volviendo a abrir las calles, dejándolas sin terminar”, recalcó un residente.
Entonces, ya no se trata de aguas negras, ahora es el enorme hoyo que quedó después del trabajo de OOMSAPAS. Los vecinos están hartos de que las reparaciones se hagan a medias y esperan que las autoridades se ocupen del problema pronto.
GC