Explosiones y tiroteo en Uppsala, corazón de Suecia

En la madrugada de este martes, una potente explosión estremeció un barrio residencial en Uppsala, Suecia, cobrando la vida de una mujer de 25 años.

La detonación, que dañó cinco viviendas y arrancó la fachada de dos de ellas, es el tercer incidente de este tipo en la semana, evidenciando una escalada alarmante de violencia vinculada a conflictos entre bandas criminales.

Horas antes, un joven de 18 años fue asesinado a tiros en un suburbio de Estocolmo, y posteriormente, otro hombre murió y uno más resultó herido en un tiroteo en Jordbro, al sur de la capital.

Estos eventos elevan a 11 el número de muertes por violencia armada en lo que va del mes, marcando el periodo más letal desde que se tienen registros en 2016.

Las autoridades suecas han intensificado sus esfuerzos para combatir esta ola de violencia.

El primer ministro Ulf Kristersson ha convocado al jefe de las fuerzas armadas y al comisionado de policía para discutir cómo el ejército puede apoyar en la lucha contra las bandas criminales, una medida poco común que subraya la gravedad de la situación.

La violencia ha dejado de ser exclusiva de los enfrentamientos entre bandas y ahora afecta a civiles inocentes.

En Uppsala, una mujer de 24 años murió en septiembre pasado debido a una explosión dirigida a sus vecinos, presuntos miembros de una banda criminal.

La policía ha iniciado investigaciones en múltiples direcciones, incluyendo la búsqueda de posibles vínculos entre los incidentes recientes y las disputas entre bandas rivales.

Se han realizado arrestos relacionados con los tiroteos y las explosiones, mientras las autoridades trabajan para restablecer la seguridad y la confianza en las comunidades afectadas.

Estos acontecimientos han generado un debate nacional sobre la necesidad de reforzar las leyes y aumentar las penas por posesión ilegal de explosivos y armas de fuego, en un esfuerzo por frenar la creciente violencia que amenaza la estabilidad y la paz social en Suecia.

YM