Con riesgo de contraer dengue y entre montones de basura, así viven en la colonia Agustín Olachea en La Paz

Con zanjas de 10 metros de largo, ramas secas, escombros y basura, entre zancudos y culebras; así viven los vecinos del callejón Boston, en la colonia Agustín Olachea, quienes están hartos de vivir así
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Callejón Boston sin pavimentar en la colonia Agustín Olachea

En la colonia Agustín Olachea, en La Paz, el callejón Boston esquina con calle Norte es un verdadero problema. Es un lugar lleno de zanjas profundas, montones de ramas secas, escombros y basura por todos lados. Además, no faltan los molestos zancudos y las culebras merodeando por el lugar.

La gente que vive allí tiene que lidiar con estas condiciones desastrosas todos los días. Los autos de los vecinos sufren daños constantes debido a la pesadilla que es transitar por ese callejón. A menudo, las llantas y los sistemas mecánicos de los vehículos se ven afectados.

Algunas veces, el departamento de Servicios Públicos Municipales intenta arreglar la calle rellenando los agujeros con tierra. Pero, después de la primera lluvia o unas semanas, la situación vuelve a empeorar. Además, el problema se agrava con los derrames de aguas negras que crean charcos y malos olores, convirtiéndolo en un foco de infección.

“Echaron tierra del otro lado, pero con la siguiente lluvia se la llevó otra vez. Ahora quedó la zanja. Para subir por aquí, especialmente si llevamos un niño o un cochecito, es casi imposible”, explicó un vecino.

Los camiones de basura tampoco pueden acceder al callejón debido a las piedras, zanjas y escombros. Como resultado, a veces no recolectan la basura, lo que provoca la dispersión de desechos y la propagación de plagas como moscas, gusanos e incluso víboras.

“Los camiones de basura no pueden subir aquí. Tienen que llevar la basura hasta la esquina. Es realmente incómodo”, comentó una vecina.

Finalmente, otro problema grave es el agua estancada. Debido a las zanjas en la calle y algunos autos abandonados, se crea una especie de lodazal. Esto atrae una gran cantidad de mosquitos, aumentando el riesgo de enfermedades como el dengue. La situación en este callejón es realmente complicada y afecta la calidad de vida de quienes viven allí.

Sofía Apodaca