Tras más de un mes de agonía muere hombre que fue quemado vivo en El Progreso

Cuarenta días después de que fue hospitalizado con quemaduras de segundo y tercer grado en el 90% de su cuerpo, Samuel “N” fue declarado sin vida en la clínica 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en La Paz.

La madrugada del 20 de noviembre, el civil de 40 años fue víctima de un trío de sujetos que lo interceptó en la vía pública para rociarlo con un líquido inflamable y prenderle fuego afuera de un domicilio localizado en las calles Progreso y calle Tezontle, en la colonia El Progreso.

Un taxista que realizaba recorridos de servicios para obtener pasaje en la zona observó al hombre ardiendo en la calle, por lo que llamó a los servicios de emergencia para que atendieran el caso. Luego del reporte enlazado con el 911, unidades paramédicas y agentes de la Policía Municipal se desplegaron en el área para activar un operativo de seguridad.

Tras recibir primeros auxilios, la víctima fue trasladada en ambulancia a la sala de urgencias del Hospital Juan María de Salvatierra, donde fue atendido de sus quemaduras. No obstante, la mañana del pasado 4 de diciembre fue reubicado a la unidad especial de cuidados intensivos de la clínica del IMSS debido a la gravedad de sus heridas.

Lamentablemente, el afectado ya no pudo soportar más y murió en medio de una larga agonía por los efectos del atentado en su contra. El personal de IMSS decretó su fallecimiento después de someterlo a prolongadas sesiones de fisioterapia para pacientes quemados. Una insuficiencia respiratoria aguda combinada con las lesiones corporales que dañaron severamente los tejidos de piel lo privaron de la vida en la cama del hospital.

Pese a que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) abrió la carpeta de investigación LPZ/8247/2023/NUC para esclarecer el ataque en contra de Samuel “N”, los culpables de haberle prendido fuego aún no han sido identificados ni mucho menos detenidos.

Por lo tanto, los archivos en etapa de indagatorias y recolección de pruebas y evidencias por el delito de lesiones calificadas en agravio de una persona ya fallecida se mantienen en espera de que los responsables sean capturados y puestos a disposición de las autoridades para su proceso penal.

GC