Indispensable fomentar conciencia sobre valor de la reserva del Puuc en Yucatán

Oxkutzcab, Yuc., 30 Nov (Notimex).- La conciencia profunda sobre el valor de una reserva biocultural como la del Puuc, y no sólo el conocimiento, es lo que puede impulsar una verdadera cultura de sustentabilidad y cuidado de la biodiversidad.

El presidente del proyecto privado Reserva Biocultural Kaxil Kiuic, James M. Callaghan, compartió la experiencia obtenida a lo largo de 15 años en este centro de desarrollo biológico, ubicado en la parte central de la región del Puuc.

Explicó que esta zona no ha sido estudiada en toda su diversidad biológica y cuenta con una reserva de mil 800 hectáreas de selva mediana sub-caducifolia en donde se ha podido tomar referencia de la situación que guarda actualmente el segundo macizo forestal de selva más importante de la región.

Callaghan señaló que es precisamente el verdadero conocimiento y conciencia de toda la biodiversidad que se encuentra en este lugar y los efectos que presentan como reflejo del fenómeno del calentamiento global, la que nos puede ayudar a revelar en qué condiciones nos encontramos y hacia dónde nos dirigimos con la actual modernidad.

Reveló que precisamente uno de los principales problemas que enfrentan ésta y muchas otras áreas es la falta de conciencia sobre lo que pasa con los ecosistemas, así como los efectos que pueden generar simples acciones como tirar la basura fuera de su lugar, cazar y deforestar.

Ante este hecho, una de las labores a las que se ha enfocado este centro de investigación es difundir la conciencia sobre esta reserva tanto en las comunidades locales como en las escuelas técnicas de la región, ya que un primer paso para que puedan hacer algo es que la misma comunidad y los jóvenes se identifiquen con los problemas de su comunidad.

Sin descartar el valor de la reforma educativa, consideró que es indispensable que se evalúe el conocimiento que se enseña y difunde en las escuelas, ya que de poco o nada sirve saber la situación que guarda la sabana o el polo norte cuando a nivel regional tenemos retos particulares que enfrentar.

En ese sentido, el coordinador de los programas de conservación y monitoreo de esta reserva, Ricardo Pazos Enríquez, aseveró que “no podemos conservar lo que no conocemos”.

Por ello, para poder realizar una verdadera estrategia de preservación se debe entender muy bien qué es lo que se tiene en este ecosistema y hacia dónde se dirigirán las acciones para conservar, restaurar o reducir los impactos de las actividades económicas como agricultura o ganadería.

La intención de este proyecto, dijo, no es solamente contar con una ubicación para investigadores, sino la conservación, tanto en la parte cultural como en la de biología.

Por ello, desde el inicio de este esquema se realizaron inventarios de flora y fauna y estrategias de protección para restaurar o mejorar la calidad de las selvas en la región.

Al respecto, recordó que tan sólo la zona sur del estado, donde se encuentra la Reserva Biocultural del Puuc, es una de las selvas medias que mejor conservada se encuentra, a diferencia de las de Quintana Roo, que más impacto han tenido.

De hecho, por encontrarse en el centro, se ha descubierto que podría tratarse de una zona de tránsito de muchas especies, ya que en años recientes se han detectado cinco de las seis especies de grandes felinos de México, como el jaguar, el jaguarundi, el ocelote, el puma y el leoncillo.

Como resultado del trabajo de los últimos 10 años, expuso, para febrero del próximo año se estará concluyendo un muestreo importante de por lo menos 40 especies, que permitirá tomar referencia de los efectos que ha tenido la actividad humana en los últimos años en esta reserva clave de la Península de Yucatán.