Invitan al Estado a conocer necesidades de CAM en CSL
Miriam Elizabeth Sánchez, monitora de la escuela Juan Pedrín Castillo en Cabo San Lucas, dijo desconocer qué es lo que pasa con los pagos de su salario debido a que sólo recibe la mitad y es que el gobierno estatal ha retenido parte de su sueldo, señalando que cada cambio de administración es lo mismo, sin embargo, el amor a su trabajo y a sus niños como ella lo dijo, la mantienen en el plantel, aguantando por varias administraciones esta situación, pide la sensibilización del gobierno.
“Nos sentimos abandonadas, desvaloradas, al igual que nuestros niños, nos preocupa mucho los pequeños, en verdad no sólo afecta nuestro bolsillo, también les afecta a ellos, la autoridad debe de sensibilizarse, queremos que se den cuenta que nuestro trabajo vale mucho la pena y no es por nosotros, sino por el acompañamiento, el amor y calidad de vida que él damos a los niños, buscando que se superen y avancen”.
Añadió que un sólo maestro no puede atender a todo un grupo, hay salones con más de una decena de estudiantes de diferentes capacidades, por eso es que monitoras piden el respeto a su trabajo, que las autoridades estatales acudan a las aulas del Centro de Atención Múltiple para que vean lo que ahí se hace.
Por su parte la directora del plantel, Miriam Gómez, explicó que a días de regresar a clases presenciales, los directivos y maestros ya saben qué hacer para que los alumnos estén seguros, sin embargo, en este cambio de gobierno, los afectados en esta comunidad escolar fueron los monitores, asistentes educativos o niñeras como les gusten llamar y es que no están recibiendo su sueldo completo; solo reciben el del Ayuntamiento pero no el del Estado, por lo que piden la sensibilización del gobierno.
“La función de ellos es básica por que el maestro organiza planea y los asistentes dan el apoyo diario a los alumnos, sacando las actividades adelante, ellos son los que se dan cuenta quien falta que le agarren la mano para escribir, alcanzarles un vaso de agua, sonarles la nariz, quien necesita un cambio de pañal o darles de comer en la boca, los monitores son básico para el desempeño académico”.
Hizo el llamado de corazón a las autoridades para que se sensibilicen en el tema y tener la puerta abierta y establecer el diálogo, en el que la comunidad de CAM pueda exponerle toda la situación y buscar una solución para las monitoras, ya sea basificandolas o retribuyendo su trabajo, es decir que sigan contando con el apoyo de su sueldo y que hoy no perciben.
Paloma Urías dijo que su hijo estudia en la escuela Juan Pedrín en el nivel secundaria, por lo que reconoce el trabajo de las monitoras, mismas que es muy necesario, ayudan mucho en el desarrollo no sólo académico del menor sino también en lo personal, por lo que exhortó a la autoridad estatal voltear a este lado y entender la necesidad.
“Mi hijo fue un niño que los neurólogos me dijeron que no iba a hablar, a comunicarse y aquí la verdad ha avanzado mucho, él ya lee y escribe y todo con el apoyo de sus maestros y asistentes, porque un maestro no puedo sólo con un grupo y necesita del apoyo de alguien más, es muy importante, por lo que hago el llamado a las autoridades para que se acerquen y conozcan la realidad y entiendan la necesidad de contar con la figura de las monitoras en CAM”.