ISIFE es rebasado por solicitudes de obras de infraestructura y falta de presupuesto

Más de 30 días han transcurrido desde que la administración de la Escuela Secundaria General “Profr. David Peralta Osuna”, realizó una denuncia a este informativo sobre el deterioro y la peligrosa inclinación que presenta una de las bardas del plantel, que se ubica sobre la calle Revolución de 1910.

Sobre este problema, la dirección general del Instituto Sudcaliforniano de la Infraestructura Física Educativa (ISIFE) en Baja California Sur, informó que se está realizando un filtrado de las obras que requieren mayor atención, pero hasta el momento no se tiene una definición prioritaria.

En un sentido más amplio, el titular de la institución, Pablo Cota Núñez señaló que a través de la plataforma de “Registro de Necesidades” (RENE), se recibió la solicitud de la citada escuela; sin embargo, la dependencia recalcó que, así como esa petición, existen otras demandas adicionales que se recibieron con anticipación.

“Habría que checar la cantidad de metros lineales que tiene dañada la barda y con mucho gusto nos damos a la tarea de elaborar el proyecto y el catálogo de conceptos para la atención del mismo.

Ahorita estamos filtrando toda la información que recibimos a través de la plataforma de Registro de Necesidades, que le llaman RENE, y que está conectada con todos los directores de los planteles. Ésta sirve para que los administrativos suban sus necesidades de infraestructura”.

El funcionario estatal indicó que la dependencia se ve limitada por el poco presupuesto que se le asigna en su actual operativo, por lo cual, deben esperar a que la Secretaría de Educación Pública (SEP) defina su planeación.

“Nos vamos a sentar a ver necesidades y prioridades. Obviamente, por el presupuesto que nos designan a veces no nos alcanza para tanto, pero ahorita estamos en ese proceso de filtrado y, próximamente, por ahí nos vamos a reunir con todos los sectores de la SEP para, precisamente, plantear prioridades y necesidades”.

Conforme pasan los días, la barda continúa representando un riesgo para los alumnos y transeúntes que pasan cerca de esta infraestructura, por lo cual, la institución educativa tendrá que resignarse a continuar con los llamados a la autoridad estatal para evitar que pase alguna tragedia.