Justo y progresista

Cada día se ven con más frecuencia manifestaciones del “pueblo justo y bueno”, por trato recibido por el gobierno, creyendo que con unos centavos va a comprar su voluntad.

Hace unos días hubo también una manifestación de militares en retiro y algunos todavía activos, protestando contra las responsabilidades dadas al ejército, completamente fuera de las obligaciones constitucionales del cuerpo armado, sin ninguna dignidad a su preparación.

Simplemente analizando a un cadete egresado del H. Colegio Militar, entrenado en sus especialidades militares, egresa con honores y con un grado de subteniente y, en lugar de enviarlo a aplicar sus conocimientos, va a dar a una aduana, o lo vuelven policía, o combatir cárteles con la orden estricta de no usar sus armas ni aplicar las estrategias ofensivas que ha aprendido.

Esto lo estamos viendo cada día, tanto con los egresados del H. Colegio Militar, como de la Escuela Naval Antón Lizardo, creando militares brillantes haciendo labores que no les corresponden.

El malestar está creciente en el pueblo, en el ejército, en la marina y, desde luego, en todos los empresarios, innovadores y toda la clase productiva de México.

Por algo quieren controlar el INE, ya que con todos estos agravantes, el voto será arrollador contra el gobierno en turno.

La soberbia les impide ver la debacle en su soporte electoral, ya que su “pueblo” ya se está dando cuenta del uso que han hecho de ellos exclusivamente como material electoral, sin mayores beneficios que una dádiva.

Esperemos que acaben de despertar en el 2024 y corrijan su voto a favor de un país “justo y progresista”