La destacada pianista sudcaliforniana Quichu Isais recibió la Medalla al Mérito Cultural “Néstor Agúndez Martínez”

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La Paz, Baja California Sur, a 2 de Junio de 2016.- “Jesús Leonor Isais Verdugo, Quichu Isais, es una mujer universal que ha sabido adaptarse a las transformaciones sociales y culturales a través de los tiempos. Ella ha sido y es una digna embajadora de la cultura y el arte de Baja California Sur, porque ha llevado su trabajo a otros países  demostrado a propios y extraños el talento que existe en nuestro estado”, aseguró la Presidenta de la Comisión de Asuntos Educativos y de la Juventud, Diputada Diana Vonborstel Luna al hablar en nombre del Congreso del Estado en la Sesión Solemne en la que la destacada pianista sudcaliforniana recibió la Medalla al Mérito Cultural “Néstor Agúndez Martínez” en su edición 2016.

En su intervención dio a conocer que Quichu Isais inició a los 4 años de edad a comienzos de la década de los años 40 su relación con la música al acceder al piano y otros instrumentos en forma lírica, para posteriormente estudiar en la recién creada Escuela de Música bajo la dirección del profesor Luis Pelaez Manríquez quien la guiaría musicalmente a lo largo de casi cuatro décadas.

Vonborstel Luna expresó que a la homenajeada, primera mujer en siete ediciones que recibe este reconocimiento de parte del Congreso del Estado, tuvo la mayor parte de su desarrollo personal y cultural cuando en Baja California Sur predominaba la corriente que los estudiosos de la cultura sudcaliforniana denominaron “La Estética del Mar y del Desiero”, en donde artistas plásticos, músicos y escritores plasmaban su arte en el rico paisaje del mar y del desierto sudcaliforniano, “y como no iba a ser de esa manera, como no iba a estar inmersa en ese movimiento, su fue alumna distinguida durante muchos años del extraordinario músico sudcaliforniano Luis Pelaez Manríquez, autor de la música de Costa Azul”.

Comentó que el deseo de superación de Quichu Isais la llevó por espacio de 12 años a trabajar y estudiar en Viena, Austria, lugar en donde estudió piano con los más prestigiados maestros de la década de los 80 en Salzburgo, e incursionando con recitales en Alemania, España y Francia.

Por su parte, la pianista Quichu Isais al hacer uso de la palabra agradeció al Congreso, a diputadas y diputados “el reconocimiento inmerecido” del cual fue objeto, haciendo un repaso de su vida, de su pasión por la música, de como muchas de las familias del primer tercio del siglo pasado en esta ciudad de La Paz tenían un piano en su casa, lo que facilitaba su estudio y ejecución.

Agradeció al maestro Luis Pelaez Manríquez la enseñanza de vida, de haberla llevado al mundo de la música, “un mundo que requiere de disciplina, trabajo y más disciplina y más trabajo”. Dijo que a su edad todavía se sienta al piano a practicar como si fuera una principiante, pues es necesario todos los días acercarse al piano “para que no se vaya a sentir”.

Isais Verdugo señaló que las nuevas generaciones de sudcalifornianos deben de voltear más al arte y la culura, porque en estas actividades “existe una gran oportunidad para crecer en espíritu y formarse como buenos alumnos, buenos músicos, pero lo más importante, mejores personas y ciudadanos en lo futuro”.

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