La evolución del sector de juegos y casinos

El sector del juego lleva muchos años siendo una parte importante de la economía nacional e internacional y, en la actualidad, no solo se manifiesta a través de grandes macrocomplejos turísticos, sino que se ha diversificado, especialmente entre las plataformas de internet.

Si pensamos en los comienzos de los juegos de azar, podríamos remontarnos a la historia del ser humano. Uno de los primeros juegos documentados proviene de la China del 2300 a. C. Concretamente, se encontraron azulejos que hacían referencia a los juegos que se llevaban a cabo en aquella época. También se ha documentado que el primer dado podría provenir del antiguo Egipto.

De cualquier modo, el primer casino, oficialmente hablando, no existió hasta 1638. Los gobernantes de Venecia oficiaron la apertura original del Casino di Venezia en plena temporada carnavalesca, con la intención de que pudieran producirse sesiones de juego pacíficas y organizadas durante esta celebración multitudinaria. De esta forma, el Casino di Venezia se convirtió en el primer lugar oficial para practicar el juego.

Luego llegaron Baden-Baden, Montecarlo, Las Vegas, Macao y, por supuesto, México. Nuestro país tiene, desde hace tiempo, algunos de los casinos físicos más importantes del mundo: el Jubilee Casino, en Monterrey; Crown City Casino, en Villahermosa; Big Bola Tlanepantla; Emotion Casino San Luis Potosí; Play City Antara, Ciudad de México; Casino Hipódromo, en Tijuana; Big Bola Querétaro, en Santiago de Querétaro; Casino Life del Valle, Benito Juárez; o Casino Royal Yak Hipódromo de las Américas, Moderna. Además, claro está, de los macrocomplejos costeros, donde en muchas ocasiones se puede disfrutar de casinos o glamurosas salas de juego.

México ha sido siempre un referente en la industria turística internacional, y el juego se ha convertido en un compañero inseparable. Sin embargo, el mercado se ha diversificado y ha viajado hacia un mundo digital. Actualmente, conviven ambas ofertas de forma próspera en nuestro país, la analógica y la digital, y esta última no deja de crecer.

En México, las máquinas tragamonedas o slots siempre han gozado de popularidad y aceptación entre los amantes del juego, y con la revolución digital se han convertido también en uno de los puntos fuertes de las plataformas online. Tanto en lo que tiene que ver con la diversidad de temáticas como en oferta en general, estas máquinas tragamonedas (que no solo han sido uno de los juegos físicos de azar más populares en México, sino en todo el planeta) ahora ocupan un espacio fundamental en la oferta de las plataformas de juego online.

No cabe duda de que la industria del juego ha sabido evolucionar a la par que los tiempos digitales que corren, permitiendo que los potenciales clientes no tengan que desplazarse a casinos o zonas de juego y puedan usar sus servicios desde la comodidad que les ofrecen sus casas.

En lo que respecta a la consagración del juego online, tienen mucho que decir las plataformas de pago, como toditoCash, Netteler o paysafecard, que proporcionan entornos seguros en los que los usuarios pueden depositar dinero sin la más mínima preocupación. La seguridad con la que se han blindado estas empresas hace que no haya grandes diferencias entre comprar cualquier artículo en un establecimiento, con tarjeta de crédito, y depositar dinero en una plataforma de juego.

En definitiva, la diversificación, la seguridad y la evolución de los productos, tanto analógicos como digitales, ha consagrado la evolución de la industria del juego, en México y en el resto de países industrializados. Esto ha permitido que el sector florezca y se convierta en uno de los puntos fuertes de las principales economías del mundo.