La política de la simulación
Calíope
Resulta inquietante observar todos los días la forma en la que los distintos gobiernos de diferentes órdenes ajustan la realidad para que cuadre en sus intereses, en sus propios discursos.
Ejemplos abundan, como cuando los políticos se tomaban la foto para la inauguración de una obra o para la entrega de despensas y luego se iban, sin obra ni despensas. Del mismo modo, ni más ni menos, la simulación del gobierno federal es igual a la de los otros, a quienes se les cayó el sistema, quienes nunca supieron de corrupción, de narcotráfico o de fraudes electorales.
La semana pasada vimos cómo el presidente López Obrador inauguró el aeropuerto de Santa Lucía. En realidad lo que inauguró fue una remodelación de la Base Militar de Santa Lucía, que será un nuevo aeropuerto civil. El vuelo inaugural que realizó desde el aeropuerto de la Ciudad de México fue un aterrizaje en la nueva pista que seguirá siendo de uso militar cuando acabe de construirse el aeropuerto Felipe Ángeles.
Con este viaje, López Obrador dijo que se había demostrado que podían funcionar simultáneamente los aeropuertos de Santa Lucía, de la Ciudad de México y el de Toluca.
Pero no es cierto, pues se tuvieron que alterar las operaciones aéreas en la Ciudad de México y Toluca. Con esta maroma cumplió la promesa de aterrizar aviones comerciales. Y así fue, tres aviones de líneas aéreas conocidas volaron sin pasajeros, con dos horas de espera en el aire y operando manualmente, dado que la base militar no tiene certificación, ni permisos, ni autorización para recibir vuelos comerciales, ni tampoco tiene una torre de control. Simulación.
Dos ejemplos más: López Obrador arrancó ayer la campaña de vacunación contra el Covid-19 con 870 mil dosis, que se recibieron como una donación del gobierno de la India, es decir el 6% de las que se necesitan para 15 millones de adultos mayores en el país.
Las primeras vacunas se aplicarán en 330 municipios del país que han sido ubicados como las zonas de mayor marginación social y donde no existe infraestructura y hospitales para la atención del virus.
Se había dicho que para la vacunación era necesario el registro en una plataforma que terminó siendo dudoso por todas las complicaciones que llevó. Al final dicho registro al parecer no sirvió de nada y la vacunación es apenas un suspiro de lo que sería una campaña de vacunación nacional.
Para seguir alentando el optimismo, ayer Félix Salgado Macedonio solicitó su registro como candidato a la gubernatura de Guerrero por Morena, en medio de las acusaciones de mujeres por acoso y violación. Todos dijeron que sería una mala imagen y pésima señal al interior del partido, que era mejor rectificar. Pero bastaron algunas explicaciones y peores pretextos para permitir su registro para participar en la contienda interna. Veremos cómo termina esta historia.
En fin, que si se quiere, sólo basta un poco de voluntad política para hacer lo que le plazca, incluso hacer que la realidad se moldee a los propios deseos.