Muere Perry Bamonte, pieza clave en la historia sonora de The Cure, a los 65 años

La escena del rock británico despide a una de sus figuras más discretas pero determinantes tras confirmarse la muerte de Perry Bamonte, guitarrista, tecladista y bajista de The Cure, quien falleció a los 65 años luego de una breve enfermedad. La noticia fue dada a conocer por la propia banda mediante un comunicado oficial, en el que subrayaron el peso artístico y humano del músico dentro de su historia.
El deceso ocurrió durante las celebraciones navideñas, un hecho que acentuó el tono emotivo del mensaje compartido por el grupo liderado por Robert Smith. Sin detallar la causa específica, The Cure informó que Bamonte murió en su casa, cerrando así el capítulo vital de uno de los integrantes que ayudó a definir el sonido de la banda durante varias de sus etapas más relevantes.
La trayectoria de Perry Bamonte dentro de The Cure comenzó en 1984, en un momento de consolidación internacional del grupo tras el impacto de Boys Don’t Cry. Su llegada se dio inicialmente como parte del equipo de gira, pero su cercanía creativa y técnica con Robert Smith lo llevó a desempeñar un papel cada vez más central, primero como asistente personal y técnico de guitarra, y más tarde como músico de tiempo completo.
A partir de 1990, Bamonte se integró formalmente a la alineación tras la salida del tecladista Roger O’Donnell, aportando una versatilidad instrumental que se reflejó tanto en el estudio como en los escenarios. Su trabajo quedó plasmado en álbumes fundamentales como Wish, Wild Mood Swings y Bloodflowers, así como en proyectos acústicos que mostraron otra dimensión del universo sonoro de The Cure.
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La banda lo describió como un músico intenso, intuitivo y profundamente creativo, cualidades que lo convirtieron en una figura esencial durante 14 años de giras ininterrumpidas. En ese periodo, Bamonte participó en alrededor de 400 conciertos, contribuyendo a consolidar la reputación de The Cure como una de las bandas más sólidas y emocionalmente potentes del rock alternativo.
Tras su salida del grupo en 2005, motivada por un reacomodo en la alineación, Bamonte continuó activo en la música al integrarse a otros proyectos como Love Amongst Ruin, sin romper nunca los lazos personales ni artísticos con The Cure. Esa cercanía quedó patente en su reencuentro con la banda durante su incorporación al Salón de la Fama del Rock and Roll en 2019.
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El vínculo se reforzó nuevamente en 2022, cuando Bamonte volvió a sumarse a la gira mundial del grupo, participando en cerca de 90 conciertos adicionales. La propia banda destacó que esas presentaciones estuvieron entre las mejores de su carrera, culminando con el concierto A Lost World en Londres, celebrado en noviembre de 2024.
Más allá de The Cure, Perry Bamonte desarrolló una carrera paralela en la industria cinematográfica, participando en la creación de bandas sonoras para diversas películas. Su trabajo quedó registrado en producciones reconocidas del cine comercial, una faceta que mostró su capacidad para adaptarse a distintos lenguajes musicales sin perder identidad.
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